El hurón: Los Óscar

Antes de que el gran Gumer pusiera patas arriba esta sección he  decidido volver a tomar las riendas. El bicho está acelerado y no para de contarme historias que, por prudencia, pongo en cuarentena.

-¿Sabes qué es la calma?, me pregunta.
-Pues claro, paz y tranquilidad.
-Y más, añade. En el caso del palacio presidencial yo diría que la calma se torna en cachaza o pachorra. Todo sucede demasiado tranquilo. Como si les faltara sangre, como si lo ocupara una legión de fantasmas.

Corto y cambio. Le sugiero que, por una temporada, busque nuevos escenarios, en la Diputación, en la Plaza Mayor, en los buenos restaurantes de la Comunidad…
-No, replica, mejor en las Cajas…
-Verás,  amigo, si quieres saber de este tema pon en marcha tu afilado olfato en los aledaños de Los Bandos y Botines. BB en adelante. Sólo te voy a decir una cosa: ha sido, y es, un proceso demasiado largo, demasiado confuso. Y si quieres saber más, a estudiar a Salamanca.

El hurón dice que algún día me dejará en evidencia, que no tengo futuro en este oficio, que callo demasiado... Pues bueno. A estas alturas de la película uno está preparado para casi todo. Y, sin cortarse un pelo, responde:
-Pues ya que hablas de películas, hablemos de los Óscar de la Comunidad.
-Pero qué me dices…
-Óscar López, jefe de los socialistas, erre que erre, no para de dar vueltas a la noria, conjugando el verbo descalificar. Salomón dijo hace treinta siglos que en el mucho hablar no faltará pecado. Que tome nota.
-¿Y el otro?
-No te va a gustar. Se trata de Óscar Puente, candidato a la poltrona de León de la Riva en Pucela.
-¿Algún problema?
-Sencillamente que anda por ahí poniendo a caldo a Rodríguez Bolaños. Y prefiero no repetirte las  cosas que dice. Eso no está bien, especialmente en un candidato joven y con futuro. Un consejo, muchacho, cuida la lengua.
  
Pues sí que están bien las cosas. Menos mal que este mamoncillo ha dejado vivo al tercer Óscar. Campillo, un todoterreno al que, el día menos pensado, voy a pedirle trabajo en su tele. ¡Menudo susto puedo darle!

Félix Lázaro. Periodista.

NOTA.- 1.-Libertad es la condición de quien no es esclavo. ¿Sabrán esto la ‘Niña de Benidorm’  (Pajín) y ‘Machaquito de León’ (Zapatero)? Eduquen, no prohíban, coño.
Me juego algo a que esto de los humos no queda así. Y no quiero hacer leña.
2.-Palomo (Graciano), amigo, eres un fenómeno. Impasible (¿el ademán?) te lo sabes todo de la derecha, menos que al ‘hombre tranquilo’, don Mariano, lo que de verdad le gusta es la pesca de la faneca en la Ría de Arosa, a bordo de una gamela y acompañado por su hijo Marianin. Esta exclusiva, protagonizada por un jefe sioux, te la guardo para el próximo libro, quizás cuando sea presidente.