www.diariocritico.com

Diferentes valoraciones para el acuerdo social

La izquierda no socialista, muy crítica con la reforma de las pensiones de ZP

La izquierda no socialista, muy crítica con la reforma de las pensiones de ZP

viernes 28 de enero de 2011, 18:54h
Según el cristal con el que se mira: diferentes valoraciones políticas al acuerdo Gobierno-sindicatos-empresarios según haya apoyado o no las políticas del Ejecutivo. Para Durán i Lleida, el acuerdo, claro, es "positivo"; para Cayo Lara, naturalmente, el acuerdo "cumple el deseo de Díaz Ferrán: habrá que trabajar más años para tener una pensión y cobraremos menos por ella". Rajoy, por su parte, recuerda lo "injusto" que fue ya la congelación de las pensiones decidida por Zapatero.

El acuerdo alcanzado entre el Gobierno y asociaciones sindicales y empresariales sobre las pensiones no es igual de valorado por todo el arco político, ni siquiera sindical. El líder del PP, Mariano Rajoy, ha advertido que para garantizar el sistema de pensiones y aumentar la cuantía de las mismas es necesario crear empleo, “porque las pensiones las pagan las personas que están cotizando hoy a la Seguridad Social”.

Además, el dirigente Popular ha recordado la oposición del PP a la congelación de las pensiones para 2011: “Me parece profundamente injusto y no había ninguna necesidad”. Y en tercer lugar, Rajoy ha expresado la disposición del PP a construir “y a llegar a entendimientos, con el objetivo básico de que en España la gente pueda trabajar para que las pensiones estén garantizadas por muchos años”.

Ahora bien, también ha dicho que "espero que en la tramitación del proyecto de ley en las Cortes, el Gobierno tenga la misma voluntad de diálogo y consenso que yo manifiesto hoy aquí. El PP quiere hablar y consensuar y cree que sería positivo que estas decisiones se tomen con el acuerdo de todas las fuerzas políticas porque son decisiones que deban quedar fuera del debate político”.

Durán i Lleida (CIU): valoración muy positiva

Por el contrario, el portavoz de CiU en el Congreso, Josep Antoni Durán i Lleida, cuyo grupo apoyó al Gobierno en este tema, ha valorado positivamente el acuerdo social porque "garantiza la sostenibilidad del sistema en el futuro", y ha destacado que el proceso será gradual, flexible y de forma no homogénea a partir del voto particular que CiU introdujo en el Pacto de Toledo.

Durán explica que “el Gobierno, inicialmente, quería situar a los 67 años la edad de jubilación y el voto particular de CiU ha permitido que la propuesta final sea flexible, gradual y que no sea homogénea y que no afecte por un igual a todos los colectivos".
 Ha dicho también que “no debemos olvidar las razones por las cuales se hacía necesaria la reforma: la evolución demográfica con el hecho de que cada vez hay menos personas que cotizan y, en cambio, muchas más personas pueden cobrar pensión gracias al hecho positivo de una mayor esperanza de vida”.

Ha añadido el portavoz de CiU que “los sindicatos han hecho aportaciones muy positivas. Por ejemplo, es evidente que al ampliar, aunque sea de forma flexible, gradual y no homogénea la edad de jubilación a los 67 años y el cómputo de años necesarios de cotización para tener pensión, aparecía un problema: que los jóvenes tenían la necesidad de cotizar cuanto antes y, en cambio, necesitamos jóvenes muy bien formados. Los sindicatos han hecho una aportación positiva a este problema: los jóvenes en proceso de formación, de postgrado, etc, que trabajen en prácticas verán como este tiempo será considerado como tiempo cotizado a la Seguridad Social".

Cayo Lara (IU): el Gobierno, sometido a Díaz Ferrán

Muy distinta es la valoración del coordinador de IU, Cayo Lara, para quien “el Gobierno va a cumplir el deseo del ex presidente de la CEOE, Gerardo Díaz Ferrán, de trabajar más y cobrar menos. Pues bien, el Gobierno va a decidir que tenemos que trabajar más años para cobrar una pensión, que es un salario diferido, y tendremos que cobrar menos por las pensiones futuras, que van a ser más bajas”.

“Es una decisión injusta e innecesaria", la calificó Lara. "Injusta porque recorta derechos conquistados por los trabajadores, y es innecesaria porque no existen razones objetivas que determinen que haya que ir a este recorte de pensiones en nuestro país. Existe superávit en las cuentas de la Seguridad Social -64.000 millones de euros en el Fondo de Reserva- y ha habido superávit en la liquidación de los presupuestos del 2010 -a pesar del intento de camuflaje de las cuentas por parte del Gobierno-, pero es que, además, tenemos más de 4’5 millones y medio de trabajadores en paro que, presumimos, algún día trabajarán y cotizarán a la Seguridad Social”.

Cayo Lara denunció los “dos objetivos invariables del Gobierno: recortar un 20 % el gasto en pensiones de la Seguridad Social y potenciar el gran negocio de la Banca privada para que se incrementen los fondos privados”. Y dijo que “desde IU mantenemos que es un asunto tan grave éste de las pensiones, de tal magnitud, que debería ir en los programas electorales de los partidos políticos en las siguientes elecciones y que sea el pueblo español, después de un debate profundo, quien tome la decisión en las urnas”.

USO rechaza el acuerdo

Tampoco hay unanimidad entre todas las centrales sindicales. Por ejemplo, Unión Sindical Obrera (USO) rechaza el Anteproyecto de Ley de Reforma de las Pensiones y lamenta la conformidad de UGT y CCOO con su contenido. Y califica todo el proceso de "tragicomedia en cuatro actos".

USO considera que la reforma aprobada por el Gobierno es "innecesaria y no servirá para cumplir los deberes señalados por las instituciones europeas de reducir el déficit público, ya que sus efectos empezarán a notarse a partir de 2013, año en el que tendremos que haber reducido nuestro déficit al 3 %".

Desde USO piensan que hemos asistido en estos meses a una tragicomedia en cuatro actos: "el primero, el de la rectificación tras la huelga general del 29 de septiembre; el segundo, la llamada a la confrontación tras el anuncio del Gobierno de extender la edad legal de jubilación a los 67 años; el tercero, la oculta negociación que se inicia en Moncloa el 10 de diciembre, y el cuarto, que supone el desenlace con un mal acuerdo que contradice los 3 actos anteriores".

Y afirman que "la dirección de esta tragicomedia ha corrido a cargo del presidente del Gobierno, que ha dirigido la actuación de los protagonistas sindicales por parte de UGT y CCOO, a la que se han sumado como actores invitados las organizaciones empresariales CEOE y CEPYME. El resultado final es una mala representación, ya que el público – los ciudadanos- sólo han conseguido que se les rebaje su pensión, tener más difícil el acceso a la misma, y tener que trabajar más años para intentar conseguirla. En definitiva, trabajar más para cobrar menos".

¿Te ha parecido interesante esta noticia?    Si (2)    No(0)

+
0 comentarios