Apuestan por el trilingüísmo, con un 30 por ciento de inglés, pero sin aclarar otras proporcionalidades
El PP avanza en su programa-marco autonómico que si gana las elecciones garantizará "a las familias que sus hijos puedan estudiar en castellano en todas las etapas educativas" y "puedan elegir el centro de su preferencia, sea público o privado". Es más, promete enseñanzas comunes en toda España -y ahora hay que pensar que hablan en clave de elecciones generales- con el fin de "garantizar la cohesión del sistema educativo en todo el territorio nacional". De nuevo, la evidencia: detrás de la declaración de intenciones está la voluntad de acabar por la vía rápida con la inmersión lingüística en Cataluña. Como tantas otras veces, se habla en general cuando se está pensando, exclusivamente, con un sentido particular.
Dentro de este capítulo educativo, los 'populares' dicen que garantizarán "el derecho al concierto" y que promoverán "la revisión de los criterios de admisión para que los padres no encuentren obstáculos en su elección del centro". Además, se comprometen a implantar evaluaciones externas para que los padres y la sociedad tengan información transparente sobre los resultados académicos y de gestión de cada uno de los centros educativos.
Añaden los populares que su programa incluirá un sistema trilingüe de enseñanza en las comunidades con lenguas cooficiales en el que el inglés ocupará un 30 por ciento. Lo que no aclaran es el reparto horario entre el castellano y la lengua vernácula. Cataluña tiene la suerte de tener transferidas las competencias en la materia. Pero en un futuro los recursos de naturaleza diversa pueden venir en forma de alud para torpedear su sistema educativo.
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