Un ex funcionario asegura que la oferta de Funespaña era "la menos mala"

Según el fiscal, Viñals, junto con el ex diputado popular Luis María Huete y el ex concejal de Patrimonio Antonio Moreno, decidieron "poner cuanto antes la gestión de la funeraria en manos de una empresa privada que fuera de su particular agrado", aceptando con ello cualquier perjuicio económico para las arcas del Consistorio.

Durante su declaración, el testigo insistió en que la opción de Funespaña era "la menos mala" respecto a las otras dos que se presentaron al concurso. Para llegar a esta conclusión, según dijo, se siguieron "criterios de eliminación" y sólo se examinaron las contraprestaciones que incluían cada una de las ofertas, obviando los aspectos económicos de las mismas.

Al ex jefe del Departamento Central se le encargó entonces emitir un informe sobre la adecuación de las ofertas al Pliego de Condiciones, que había sido redactado con anterioridad por técnicos de la Concejalía de Patrimonio por tratarse de una enajenación de acciones de la funeraria municipal. "Yo valoré formalmente las tres ofertas, pero había flecos económicos de los que no podía pronunciarme porque no tenía conocimiento de ese tipo de cuestiones", señaló Pérez, quien explicó a la Sala que con anterioridad participó en una serie de reuniones para dilucidar que área se encargaría de tramitar el expediente para iniciar el proceso de privatización de la funeraria.

Recomendó "más sosiego"

Sobre las ofertas de las empresas licitadoras, apuntó que las tres "encajaban perfectamente" en el Pliego, aunque manifestó que entonces se tendrían que haber matizado más. "Ninguna de las ofertas me satisfacía plenamente. Pensé que sería preferible un poco más de sosiego para que las empresas licitadoras hubieran matizado mejor sus opciones", indicó.

Ante esta situación, aconsejó a Huete y Viñals declarar desierto el concurso, pero éstos le comentaron que la situación económica de la funeraria era "desastrosa". "Me dijeron que era prácticamente necesario solucionar el problema antes de que cumpliera el ejercicio económico", añadió al respecto.

Pese a que Funespaña incluía en su oferta que la adquisición sería por sólo 0,6 euros, el testigo explicó que la compañía se comprometía a rehabilitar el pórtico de la Catedral de la Almudena, a realizar una ampliación de capital y a asumir la deuda contraída por la Empresa Mixta con el Ayuntamiento.