Xavier Trias muestra las líneas maestras de su mandato

Lo ha afirmado este jueves en rueda de prensa a un día de tomar posesión como primer edil. Con ello cumple una de sus promesas electorales, y ha confirmado la estructura del nuevo gobierno que este miércoles avanzó Europa Press, y que marcará un punto y aparte en la historia democrática del consistorio porque pondrá fin a 32 años de gobiernos socialistas sin interrupción. En concreto, la Comisión de Gobierno pasará de 22 a 16 miembros, de seis a cinco áreas políticas del Ayuntamiento, las 17 concejalías se quedarán en 13, los cuatro delegados municipales pasarán a uno, y de los nueve comisionados de gobierno por ahora serán cuatro, aunque deja una puerta abierta a crear algún otro. Trias velará por el "buen ambiente" demostrado en el pleno de despedida de los ediles salientes del martes, a lo que en parte se ve obligado porque gobernará en minoría y será el Ejecutivo con menos ediles de la historia democrática, y ha certificado que ha llegado al consistorio con intención de quedarse ocho años (dos mandatos). Mantendrá algunos cargos del gobierno socialista, como el gerente de Urbanismo en este mandato e imputado por el caso del hotel del Palau, Ramon Massaguer, que coordinará las empresas municipales; los comisionados de Inmigración y de los Juegos de Invierno 2022, Dani de Torres y Enric Truñó; y ha ofrecido quedarse a la directora financiera, Pilar Solans, para que al menos encauce el primer presupuesto del nuevo equipo. Ha matizado que no incorpora a militantes socialistas sino a gente que hace bien su trabajo, ha hecho una defensa cerrada de Massaguer -"nunca he visto a un funcionario mejor que a Massaguer y espero y deseo que sea exonerado de cualquier cosa"- y ha avalado a Truñó y a Solans -a punto de jubilarse-, con amplio prestigio en el sector financiero. En relación a De Torres, y tras un mandato en que PSC y CiU han pactado las políticas de inmigración, ha matizado que le tiene "aprecio personal" y que lo mantienen porque aún no han decidido quién llevará estos temas, y no descarta cambiarlo más adelante. Cinco grandes áreas El organigrama se estructura en base a las cinco grandes áreas encabezadas por cinco tenientes de alcalde, de los que dependen el resto de concejalías, un delegado y los comisionados, y luego estarán los diez ediles de distrito, de los cuales sólo las de Ciutat Vella y Les Corts tendrán dedicación exclusiva en sus territorios sin compartirlos con otras áreas de gobierno. Así, de la primera tenencia de alcaldía -Presidencia y Seguridad, liderada por el convergente Joaquim Forn- dependerán dos concejalías: Presidencia y Territorio, a cargo de Jordi Martí (CDC), y Movilidad, que ocupará Eduard Freixedes, además del comisionado de Participación Ciudadana, que recaerá en Carles Agustí. La segunda, la de Economía, Empresa y Empleo y que lidera Sònia Recasens (UDC), tendrá una concejalía dedicada al Comercio, Consumo y Mercados, que pivotará el también democristiano Raimond Blasi. La tercera agrupa Urbanismo, Infraestructuras, Vivienda, Medio Ambiente y TIC, la ocupa Antoni Vives (CDC), y habrá una concejalía específica para Medio Ambiente, liderada por un histórico en la materia y el concejal más veterano del consistorio, Joan Puigdollers (CDC). Trias ha confirmado que desde el primer pleno ordinario, que podría ser el 14 de julio para ratificar el equipo, pretende que no sea el alcalde quien modere el pleno, sino crear la figura del presidente de las sesiones, y quien tiene más números es Puigdollers. La cuarta tenencia es la macroárea de Calidad de Vida, liderada por Maite Fandos -que también se encargará del distrito de Gràcia-, e incluye: las concejalías de Familia, Infancia, Usos del Tiempo y Discapacitados, a cargo de Irma Rognoni (UDC); de Mujer y Derechos Civiles, la convergente Francina Vila, y de Adolescencia y Juventud, para Blasi. También dependerán de esta área la delegada de Salud, Cristina Iniesta, y los comisionados de Inmigración, Daniel de Torres, de ancianos, Assumpció Roset, y de los Juegos de 2022 -proyecto que Trias ya asume como suy--, Enric Truñó. La quinta tenencia es la de Cultura, encabezada por Jaume Ciurana (CDC), y habrá una concejalía específica para Educación y Universidades, liderada por el democristiano Gerard Ardanuy. En relación a los distritos, la convergente Mercè Homs se dedicará en exclusiva a Ciutat Vella, el distrito central y siempre en el punto de mira por la inmigración, el turismo y la presunta trama de corrupción de licencias; y la también convergente Elena Turalló asumirá Les Corts. El resto de distritos se los reparten los democristianos Ardanuy (Eixample), Rognoni (Nou Barris) y Blasi (Sant Andreu) y los convergentes Freixedes (Sant Martí), Vila (Horta-Guinardó), Puigdollers (Sarrià-Sant Gervasi) y Martí (Sants-Montjuïc). A falta de cerrar algunos flecos, todo apunta a que ninguna de las presidencias de los plenos del distrito y de las comisiones municipales recaerá en CiU y, en los distritos, el PSC podría ocupar las presidencias de los cinco distritos en los que ganó en las municipales, el PP en tres e ICV-EUiA en dos. En relación a las comisiones, pasarán de ocho a seis y seguirán la estructura de las tenencias de alcaldía a excepción de la primera, que se desdoblará y habrá una de Presidencia y otra de Seguridad y Movilidad: en este ámbito sí que UxB (que incluye a ERC) podría tener una presidencia.