Bajó el paro... menuda sorpresa

Desde entonces, el Ejecutivo ha estado anunciando que en septiembre todo cambiaría y los datos laborales serían muchos más positivos que en agosto. Hay un pacto no escrito que dice que hasta que el Ministerio de Trabajo y Asuntos Sociales no haga públicos los datos, nadie puede adelantar las cifras.

De hecho, hace un par de años se lió una buena porque Aguirre hizo oidos sordos y se adelantó al ministerio anunciando las cifras el día antes.

Lo que pasa es que, aunque no haya dado cifras, el Ejecutivo se mostró desde el principio muy confiado en que agosto sólo fue un bache. Incluso a los pocos días de septiembre, el presidente del Gobierno y el titular de Trabajo ya anunciaban a bombo y platillo que la Seguridad Social había recuperado ya lo perdido en el mes anterior.

Sin embargo, hay un dato mucho más claro y fidedigno que nos convenció a todos, antes de que se publicaran los datos,  de que septiembre había sido un buen mes para el empleo.

Y este dato no fue otro que la convocatoria para la rueda de prensa. Pocas veces el ministro de Trabajo se deja ver en el habitual encuentro que el secretario de Estado de Seguridad Social, Octavio Granado, y el secretario general de Empleo, antes Valeriano Gómez y ahora Antonio González, tienen el día en el que se publican los datos.

Así que cuando se anunció que Caldera estaría presente en esta convocatoria, los periodistas podrían haberse puesto a escribir ya la crónica de lo que fue un crecimiento anunciado.