Sarkozy impulsa un 'IVA social' y pone sobre la mesa 430 millones para generar empleo

Tales acciones consistirán en potenciar la formación de los desempleados y en desarrollar la actividad parcial, con costes previstos de 150 y 140 millones de euros respectivamente. También se quiere resucitar el dispositivo "coste cero" de jóvenes para promover la contratación de menores de 26 años, a lo que se destinarán 100 millones de euros. Según este programa, que ya se intentó aplicar en 2008, el Estado se haría cargo de los costes de contratación de jóvenes, aunque se descartó entonces por ser demasiado caro. Los 40 millones restantes serán para crear mil puestos de trabajo en PôleEmploi (equivalente al INEM), con el objeto de hacer frente a las crecientes solicitudes de empleo.

Además de estas primeras medidas de urgencia, muchas de las cuales ya habían sido adoptadas en Francia con ocasión de otras crisis, también se llevarán acabo reformas estructurales. En particular se quiere implantar el 'IVA social', un aumento de este tributo que se destinará a financiar parte de la Seguridad Social. Nicolas Sarkozy espera asimismo recibir ayudas de la Unión Europea que le permitirán doblar las cantidades designadas al servicio de los desempleados.

La Medef, la patronal francesa, ha acogido muy bien las decisiones tomadas el miércoles por El Elíseo y se ha comprometido a participar en programas de formación para 60.000 trabajadores. Los sindicatos, por su parte, estiman que las medidas anunciadas no tendrán un impacto real sobre el empleo por radicar el auténtico problema en el elevado coste del trabajo y en la financiación de los sistemas de protección social.


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