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Las vacaciones de mesié Hulot, perdón, Rajoy

Las vacaciones de mesié Hulot, perdón, Rajoy

domingo 12 de agosto de 2012, 09:54h
No sé a qué maldición obedecerá que los gobernantes que elegimos estén más allá de la mediocridad. Que el presidente *Rajoy* no es el hombre adecuado lo sabemos desde que calificara de *hilitos de plástico* (sic) el desastre del Prestige. Incluso antes, cuando fue ministro de educación y nos legó esa ley espantosa sobre la Formación Profesional que la volvió educación de segunda categoría alejada del ideal técnico que la ampara en el resto de Europa. O todavía podemos remontarnos hasta el desastre de la LOFAGE de cuando fue  Ministro de Administraciones Públicas.

Vamos, que aunque sea un simplificación justamente lo que peor funciona en España y que son dos de las varias causas -sistema educativo no enfocado a las necesidades laborales europeas y sistema administrativo autonómico disfuncional- de la actual situación se las debemos a este hombre.

No quiero hacer sangre: la culpa es tan de él como nuestra por elegirlo. Y antes de que la caverna me salte al cuello, el presidente *Zapatero* no fue menos mediocre y al presidente *Aznar* mejor no meneallo: el más esforzado, indudablemente, de la Troika Infausta pero el más equivocado en los planteamientos (Por favor, absténganse de contarme el milagro económico de JMAL por lo menos sin haber leído mis columnas económicas de los últimos dos años: ni fue milagro ni fue económico ni mucho menos fue cosa de él exclusivamente) y la potencia sin control, como bien decía el spot de Carl Lewis, no sirve de nada.

Der Spiegel publica un artículo muy interesante en el que se describe con bastante exactitud la situación española y se carga directamente sobre las espaldas de un presidente ausente ineficiente y escasamente preparado la caída en picado de las variables macroeconómicas en los últimos seis meses. Der Spiegel, además,
se muestra francamente sorprendido por la capacidad de presidente y ministros (españoles) de mentirnos o, simplemente, de no informarnos adecuadamente como si España fuera su finca. O pazo. Y todo esto sin contar que el gobierno Rajoy no está aplicando ni una sola (insisto: ni una sola) de las recetas que formuló en campaña. Podemos ser Quijotes, pero no Rucios: quede de ejemplo Japón cuyo primer ministro, *Yoshihiko Noda*, a pesar de haber superado parlamentariamente la moción de censura a que fue sometido por la oposición, ha decidido disolver el parlamento y acudir a nuevas elecciones solamente porque se ha visto obligado a subir el IVA sin haberlo propuesto, anunciado o advertido durante su campaña electoral.

Llevamos tres semanas, al momento de escribir estas líneas, sabiendo que la intervención o el default -dos caminos para idéntico destino- están en el alero y que en cualquier momento caerán sobre nuestros hombros. El 8 de agosto, sin ir más lejos, Italia dijo públicamente que está tratando sobre su rescate con Alemania y Bruselas (y su situación es mejor que la nuestra en todos los ratios: el que su deuda soberana sea porcentualmente un poco más alta que la nuestra no es, necesariamente, un empeoramiento económico) y nosotros, por comparación, tenemos un ministro que dice que no necesitamos más que 100.000 MM € para salvar la banca, un presidente invisible que, con dos y un palito, se va de vacaciones y una vice, talentuda pero servilista, que las califica de "merecidas vacaciones". (Seamos serios, en la situación actual que el presidente se vaya de vacaciones o es una espantá -miedo escénico- o es una huida -escapismo ante
circunstancias que le superan- o, simplemente, es desinterés).

La verdad es tan simple que aterra escribirla: las probabilidades de caer en default son muy altas y el gobierno (Rajoy, Rubalcaba, Zapatero, Mas...) no puede tomar esa decisión por nosotros los españoles. Por más aversión que los políticos que padecemos sientan por la democracia, lo cierto es que se trata de una decisión que debe ser acordada en referéndum. Es más, en 33 años de democracia no ha habido ninguna decisión más importante que esta para ser refrendada por el electorado: una cosa es que hayamos elegido un presidente poco preparado lo que es nuestra culpa y responsabilidad como cuerpo electoral, y otra muy distinta es que se nos usurpe el presente, el futuro y la prosperidad de nuestros hijos. #ReferendumRescate
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