El "mal ejemplo" de la izquierda

El  asalto a un supermercado de Écija, por el alcalde de Marinaleda Sanchez Gordillo, quedándose en la puerta, sabiendpo que como aforado no podía ser detenido mas que "infraganti" mientras quedaba la acción en manos del Sindicato Andaluz de Trabajadores (SAT)  para aprovisionarse de alimentos, seguida por el realizado por unos jóvenes en Sevilla, demuestra como el mal ejemplo cunde con rapidez.  Los dos  detenidos de los siete iniciales,  poco después quedaban en libertad con cargos, mientras que el propio SAT anunciaba que no descarta más asaltos, y que "una cosa es la legalidad y otra la justicia".. A continuación vino la ocupación de una finca y El Juzgado de Ecija ha dejado este viernes en libertad a dos más de los siete jornaleros detenidos por el asalto a un hipermercado, que se unen a los dos liberados el jueves, y la Policía ha citado a declarar al diputado de IU Juan Manuel Sánchez Gordillo, que ha anunciado nuevas ocupaciones de bancos y fincas.

Por si fuera poco ante las declaraciones contrarias de PSOE,PP El diputado de IU Gaspar Llamazares ha defendido este miércoles al alcalde de Marinaleda (Sevilla) y diputado autonómico de IU, Juan Manuel Sánchez Gordillo, después de que ayer participara en el asalto a un supermercado andaluz para dar productos a un banco de alimentos y ha manifestado que el Código Penal "justifica" este tipo de acciones "en situaciones dramáticas".

«Alguien tiene que hacer algo para que haya familias que puedan comer todos los días». Es el argumento en el que se escudó Sánchez Gordillo tras saquear dos supermercados andaluces. Al mismo «carro» se subió el diputado de IU Gaspar Llamazares, quien además de defender la actuación de Gordillo aseguró que hasta el Código Penal la «justifica» en situaciones dramáticas. Los dos son diputados -el primero, autonómico, y el segundo, nacional- y gozan de sueldos públicos y privilegios que además son publicados por la Cámara Baja.

Gaspar Llamazares y Cayo Lara reciben una asignación base por su condición de diputados de 2.813,87 euros al mes. A dicho sueldo hay que sumar una serie de complementos mensuales por razón del cargo que ostentan. Llamazares recibe 1.431,31 euros más por ser presidente de la Comisión Mixta para el Estudio del Problema de las Drogas. Lara recibe 1.741,19 euros mensuales por ser portavoz titular de la Junta de Portavoces en gastos de representación y 926,31 euros en gastos de libre disposición. Además, los dos cobran una indemnización por gastos de alojamiento y manutención, de 1.823,86 euros en el caso de Llamazares, diputado por Asturias, y de 870,56 euros en el de Lara, electo por Madrid, concepto exento de tributación. Cuentan con un «bono taxi» con límite anual de 3.000 euros y el Congreso cubre sus gastos de transporte público. Gozan de dietas por desplazamiento, de entre 120 y 150 euros por día en función del destino, así como de iPads y iPhones que el Congreso les regala. Cayo Lara cobra, además, 42.983,86 euros al año como coordinador federal de IU, quien critica que no se tomen medidas con la Iglesia, la Casa Real o las grandes.  IU se apunta, a los antisistema, que usan la algarada como sistema de oposición.

Además Sanchez Gordillo, se presenta en el infraprograma de Tele 5 "El Gran debate" para decir que hay que meterse más con la corrupción de la derecha, a la vez que ante una encuesta que le era desfavorable, presento los datos de otra encuesta del El Mundo que le era más favorable. ¡A esto hemos llegado! A la democracia asamblearia de las encuestas y a las algaradas callejeras. Me recordó los disturbios de Los Ángeles de 1992, también conocidos como la revuelta de Rodney King, o los disturbios de Rodney King, que explotaron el 29 de abril de 1992, cuando un jurado compuesto casi completamente por blancos absolvió a los cuatro agentes de policía que aparecieron en unas grabaciones tomadas por el videoaficionado George Holliday,  mientras propinaban una paliza al motorista negro Rodney King. King, que huía de la policía, fue perseguido por la autopista a unos 185 km/h. Miles de personas en Los Ángeles, California, principalmente jóvenes negros y latinos, se unieron en lo que fue frecuentemente presentado como un disturbio racial, llevando a cabo multitud de infracciones de la ley, incluyendo pillajes a supermercados, incendios provocados y asesinatos. En total, entre 50 y 60 personas murieron durante los disturbios.

Había que ver a los sublevados, llevándose de las tiendas los televisores y otros aparatos que no tenían nada que ver con  el hambre. Se estima que se perdieron entre 50 y 60 vidas, y unas 2000 personas fueron heridas. Los daños materiales rondaron entre 800 y 1000 millones de dólares. Hubo aproximadamente 3600 incendios, que destruyeron 1100 edificios, produciéndose en algunas zonas una llamada a los bomberos cada minuto. Unas 10.000 personas fueron arrestadas, el 42% afroamericanos, 44% hispanos, 9% blancos, y 2% de otra etnicidad. Estos números son aproximadamente proporcionales a la distribución racial de los residentes de las áreas donde se produjeron los disturbios, aunque no de Los Ángeles al completo. Los comercios fueron el objetivo principal. A pesar de la imagen de conflicto racial, gran parte de la violencia fueron robos de artículos de lujo por parte de oportunistas. Los criminales usaron el caos para su propio beneficio, y las bandas callejeras ajustaron cuentas mutuamente y con la policía. En otras ciudades de los Estados Unidos se produjeron altercados de menor importancia, especialmente en Las Vegas, Atlanta, y San Francisco, pero también en Oakland, Nueva York, Seattle, Chicago, Phoenix, Madison, Wisconsin, e incluso en la ciudad canadiense de Toronto.

Todo es cuestión de encender la mecha, con cerca de 6 millones de parados, acostumbrados a subvenciones, aunque sean de 400 euros, PER y sanidad gratuita, y la emigración legal e ilegal cada vez con menos posibilidades de empleo. El Instituto Nacional de Estadística (INE),  cifra en un 10 % (unos 4.440.000) los inmigrantes censados en nuestro país. Pero ésos son precisamente los 'legales'. ¿Cuántos hay de forma irregular?. Sólo de Bolivia han entrado más de 120.000 ciudadanos, de los cuales sólo unos 4.500 tenían permiso de residencia. El resto entraron como 'turistas'. Pero una vez acabado el plazo de 'turismo', no hay constancia de que de 120.000 entradas haya habido ni una sola salida . Es decir 6 millones ¿Cuánto tardaran, ahora, los hambrientos, en los barrios marginales, azotados por el paro en asaltar comercios y supermercados?


Bernardo Rabassa AsenjoPresidente de honor y de Relaciones Exteriores del Club Liberal EspañolPresidente de la Fundación FIECS 'Instituto Europeo para la Comunicación SocialInternational Regional Commodore of Iberia of IYFR