¿Un Barça-Madrid en paz? Todo apunta a que ahora sí

¿Ha vuelto la cordura a los 'clásicos'? ¿Se jugarán sin tensión los Madrid-Barça de la Supercopa? Todo parece indicar que sí. Lo que sería una magnífica noticia para el fútbol y la imagen de España tras el pésimo ejemplo dado en los anteriores encuentros, tanto en el campo -patadas por doquier, entradas asesinas, tarjetas-, como en declaraciones previas y posteriores de alta carga dialéctica.

Al menos en el ambiente previo al partido de mañana, de ida, en el Nou Camp, donde es más que posible que que se tratará sólo del mayor espectáculo del mundo futbolero con los dos mejores equipos planetarios. Todo indica que habrá tranquilidad y que los magníficos jugadores de ambos equipos -varios de ellos compañeros en La Roja, donde se llevan de maravilla- se dedicarán a su oficio y profesión que es ésa: jugar al deporte rey.

A ello ha contribuido la llamada de Piqué a Pepe, tras la lesión del central madridista el domingo que le impedirá estar en la expedición blanca, y el agradecimiento de éste. Además, si todo se desarrolla con normalidad sería más simbólico, porque en los banquillos se sentarán Vilanova y Mourinho, que le metió el dedo en el ojo en el partido de este torneo el año pasado, y que también han apostado porque no se repitan semejantes imágenes. Que quieren que ahora sea lo que debe ser: una fiesta del fútbol. Pues eso, que así sea.