Los padres de Villanueva de Alcardete piden a Cospedal que mantenga la plaza de logopeda en el colegio

En un comunicado, los padres y madres de la localidad de Villanueva de Alcardete dicen rechazar "con rotundidad" la decisión del Gobierno de Castilla-La Mancha  de eliminar la plaza de profesora de Audición y Lenguaje (AL) de nuestro colegio público "Nuestra Señora de la Piedad" para el próximo curso 2013-2014.

Explican que la supresión de esta plaza "va a causar un grave perjuicio a los niños y niñas, que requieren de este apoyo educativo fundamental para su desarrollo y evolución académica".

"No entendemos y mucho menos compartimos esta decisión del Gobierno Regional que no beneficia a nadie, sino todo lo contrario, va a perjudica enormemente a los estudiantes de nuestro pueblo" dicen los padres de este centro toledano que explica que hasta la fecha esta profesora atiende a los 16 niños y niñas de lunes a jueves durante 5 horas diarias, mientras que el viernes se desplaza al colegio de la localidad de Cabezamesada para atender a los estudiantes que lo requieren.

"Inquietud y nerviosismo"

Entre los padres, explican, se ha instalado "la inquietud y el nerviosismo" a pesar de la reunión que mantuvieron padres y madres con el inspector educativo y de la que dicen, "no informó al AMPA del centro escolar". En esa reunión se explciaba que para el próximo curso sólo recibirán clases de logopedia una mínima parte de los alumnos que necesiten de este servicio, debido a que será el profesor del colegio de Corral de Almaguer el que se desplace a Villanueva de Alcardete y Cabezamesada. 

"Es decir, que vamos a sufrir una reducción drástica de los días y las horas de atención a nuestros hijos e hijas", lamentan para añadir que no se conforman con la que califican de "solución chapuza que nos han dado desde la Consejería  y criticamos que, encima, fuera capaz de asegurarnos que el servicio se va a quedar igual cuando está más que claro que no va a ser así".

Desde el AMPA de colegio público "Nuestra Señora de la Piedad" denuncian lo que consideran "discriminación" para sus hijos "por el mero hecho de vivir en el mundo rural". "Pagamos los mismos impuestos", espetan.

Algunos de los pequeños que acuden a este centro escolar padecen el trastorno del espectro autista (TEA).

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