La Fiscalía de Madrid rebaja 7 años la solicitud de condena a un violador

En sus conclusiones definitivas, la fiscal modificó su calificación jurídica al sustituir el delito de violación del que se le acusaba en un principio por otro de agresión sexual. Para ello, adujo que la agresión consistió en diversos tocamientos, sin que esté acreditado que el acusado hubiera mantenido una relación sexual plena con la menor, en contra de su versión.

La rebaja se produjo al alcanzar la fiscal un acuerdo de conformidad con la defensa del procesado y el abogado de la acusación particular, que representa a la víctima, para condenarle por un delito de agresión sexual y una falta de lesiones. Así, Bienvenido M.M. aceptó la pena de dos años de cárcel solicitada por el Ministerio Público, al reconocer que efectivamente sometió a la joven a diversos tocamientos, si bien aseguró que fueron consentido por parte de la chica.

Frente a su relato, la joven explicó a la Sección 23 de la Audiencia madrileña que el 24 de septiembre estaba andando por la carretera antigua de Burgos, cuando Bienvenido se ofreció a llevarla a su casa. Pasados unos minutos, éste estacionó el coche en un descampado y bloqueó las puertas de salida.

"Me agarró fuertemente del cuello. Me cogió de un brazo. Me quitó parte de la ropa y me manoseó por todo el cuerpo", relató la chica, a quien el acusado dejó en San Sebastián de los Reyes.

Aborto con 13 años
En la prueba pericial, los psicólogos que atendieron a la joven indicaron que ésta presentaba "una experiencia sexual que no se correspondía con la de una chica de 14 años".

Los expertos la definieron como "una persona impulsiva e irreflexiva" con cierta carencia de controlar sus límites y su propio autocontrol. De hecho, revelaron a la Sala que la chica se había provocado un aborto cuando tenía 13 años.