www.diariocritico.com
La potencia turca

La potencia turca

martes 12 de agosto de 2014, 18:35h
La economía le ha proporcionado a Recep Tayip Erdogan los votos que necesitaba para continuar con su proyecto islámico para Turquía. La mayoría absoluta alcanzada en la primera vuelta de las elecciones presidenciales contrasta con la victoria insuficiente que consiguió Erdogan en los comicios generales de hace 2 años. Su ambición de reformar el estado turco se frustró porque no alcanzó la mayoría suficiente en el Parlamento. Ahora, tras la demostración de fuerza electoral se dispone a reformar la Constitución para dotar de poderes a la presidencia y para cambiar definitivamente el carácter laico del país, impuesto por el padre de la Patria turca, Mustafa Kemal Ataturk en 1924. 

Erdogan quiere convertir la presidencia turca en un centro de poder mayoritario con el riesgo evidente de convertirlo en totalitario, si nos atenemos a los signos que ha demostrado cuando se registraron manifestaciones en contra de algunas de sus decisiones y ordenó una durísima represión ejercida por las fuerzas de seguridad. El crecimiento de la economía turca, con índices notables en todos los sectores y una mejor distribución de la riqueza entre los 77 millones de turcos que sufren enormes desigualdades sociales han sido factores determinantes de la confianza otorgada a un político que también ha sabido sembrar la chispa del orgullo nacional y de su papel como potencia en la región, sobre todo en Irak, y con el rechazo a Israel. 

Después de 11 años en el Gobierno, Erdogan ha ganado una batalla fundamental para el control del poder en Turquía, la que planteó a las todopoderosas Fuerzas Armadas que ostentaban en el Consejo de Seguridad Nacional el poder total para preservar las esencias laicas de un país enclavado entre Oriente y Occidente y que ha tenido un protagonismo decisivo en la geopolítica de la zona durante los últimos 15 años, sobre todo como uno de los mejores aliados de Estados Unidos en el seno de la OTAN. El rechazo a su ingreso en la Unión Europea por intereses cruzados de alemanes, franceses, británicos, italianos y nórdicos (España aparentemente apoyaba) ha constituido otro elemento de fomento del nacionalismo turco encauzado hábilmente por el partido Justicia y Desarrollo de Erdogan para afianzar un sentimiento de potencia emergente que utiliza la economía y su influencia creciente en la zona para presentar un proyecto propio para orgullo de sus ciudadanos. Erdogan puede ser un factor de estabilidad o de gran preocupación para Occidente.

Javier Fernández Arribas

Periodista. Director de 'Atalayar, entre dos orillas'. Colaborador en diversos medios como Punto Radio, Onda Cero, COPE, El Independiente y Colpisa. Colaboro en COPE, Colpisa, TVE, RNE y Diariocritico. Es autor de libros como 'Casco azul soldado español' o 'Misión: Líbano'. También fue director de los estudios 'Cómo informar sobre infancia y violencia' y 'Cómo informar sobre violencia contra la mujer en las relaciones de pareja' en colaboración con el Centro Reina Sofía para el Estudio de la Violencia.

¿Te ha parecido interesante esta noticia?    Si (2)    No(0)

+
0 comentarios