Zapatero clausuraba en Granada la conferencia en la que se ha aprobado el programa electoral del PSOE-A y además de dar su apoyo a
Chaves, ha repasado las iniciativas que su gobierno a puesto en marcha en especial la ley de Igualdad que hace unos días respaldaba el Constitucional,
"aquí está la ley de igualdad más avanzada de todos los países democráticos". Entre otros temas ha hablado de los esfuerzos por acabar con el maltrato, la ley de dependencia, las energías renovables o la inversión en I+D+I. Respecto a la vivienda, uno de los temas que más preocupan a los ciudadanos, ha señalado que desde su gobierno han duplicado la construcción de vivienda protegida con respecto al gobierno del Partido Popular y se ha referido a la ayuda de 200€ al alquiler como una manera de que "
los jóvenes puedan emanciparse como en cualquier país europeo".
Gallardón y el giro a la derecha del PP
Pero ante todo ha criticado a los populares a los que ha acusado de
"radicalizarse". Se ha referido a la polémica sobre las listas del PP y ha asegurado que dejar fuera a
Gallardón no es más que otro signo del "
giro a la derecha del PP" que nos intenta retrotraer a tiempos de "
oscurantismo". "
Cuando uno se va tan a la derecha y no pueden gobernar la pluralidad en su partido y tiene que excluir a uno o a otro cómo va a a garantizar una España tan diversa como corresponde a una España democrática", sentenciaba Zapatero. En este sentido ha criticado también las directrices tomadas desde el PP en el
caso Severo Ochoa y a la respuesta que dieron ante la crisis de las clínicas abortistas. Zapatero ha criticado que su reacción fue tan desproporcionada que en realidad el PP lo que pretende en realidad es "
derogar" la ley del aborto y no hacerla cumplir respetando el derecho de las mujeres a tomar libremente una decisión tan difícil. Para rematar su argumentación ha querido dejar claro que "
nadie tiene el derecho a imponer con quién tiene que casarse o si tiene que pasar un tiempo antes de divorciarse si es libre y quiere hacerlo", en alusión a la ley de matrimonios homosexuales y al llamado 'divorcio express'. Según Zapatero, el PP está muy lejos de lo que quieren y necesitan los ciudadanos y ha dejado entrever cómo influye cierta moral a la hora de hacer política.
"Me revelo contra aquellos que son capaces de utilizar cualquier método para imponer su moral" y por su puesto
"no lo vamos a tolerar". A los obispos se dirigió esplícitamente cuando una mujer interrumpió su discurso con un
"¡Qué la gente de la Iglesia no vote!" a lo que respondió con un "
Sabéis lo que sucede que en democracia el máximo poder no lo tienen los poderosos, el máximo poder lo tienen los ciudadanos" que concluyó con un fuerte aplauso del público asistente
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