Descentralización mapuche

Ese dinero es para propiciar una mayor descentralización, participación y protección social de estos grupos.

La información la destaca el lunes en su portada el diario El Mercurio. "Creemos que la mayor contribución que podemos hacer (con los indígenas chilenos) es traspasarles la experiencia española de reforma administrativa, fiscal y de los distintos ámbitos, para dotar de una mayor autonomía a estos sectores de la ciudadanía", explica a ese diario Rafael Soriano, subdirector general de Cooperación con los Países de América del Sur y responsable del "Programa Indígena", de la Agencia Española de Cooperación Internacional (AECI), entidad autónoma adscrita al Ministerio de Asuntos Exteriores.

El Programa Indígena plantea algún grado de mayor descentralización de los pueblos originarios de América Latina. Pero, según constató El Mercurio, los mapuches son bastante más ambiciosos en su afán de aplicar en Chile el modelo español de comunidades autónomas.

"Si al interior de España existe el País Vasco o Cataluña y nadie en Chile se escandaliza mayormente, ¿por qué en Chile no podría existir un País Mapuche?", ha declarado Pedro Gustavo Quilaqueo, presidente de Wallmapuwen, el partido político que grupos indígenas inscribieron en el Servicio Electoral para competir en las próximas elecciones municipales.

La formación de Wallmapuwen o "país mapuche" contó con el apoyo de partidos nacionalistas e independentistas europeos, como los que gobiernan en Galicia y Cataluña, y como el que plantea la independencia de la región de Bretaña, en Francia.

Estas colectividades y otras entidades sociales están apoyando el lobby internacional de los dirigentes mapuches para lograr que el Parlamento Europeo los reconozca como etnia originaria de Chile y para que dicte una resolución en contra del gobierno de Michelle Bachelet por violaciones a sus derechos humanos.

La "diplomacia" mapuche también está haciendo gestiones para entorpecer las inversiones europeas en la Araucanía.

"El Programa Indígena" de la AECI surgió en el marco de la conmemoración de los 500 años del descubrimiento de América, para fortalecer la cooperación de España con América Latina. Presta "apoyo a la participación plena y efectiva de los pueblos indígenas en los procesos de decisión locales, nacionales, regionales e internacionales, relevantes para la consolidación del reconocimiento jurídico de sus derechos".

Sobre los indígenas chilenos, Soriano explica que apoyan "procesos de reforma del sector de la justicia, de los órganos de participación ciudadana y de diálogo social, así como la descentralización para garantizar la gobernabilidad democrática".

El estado español también respalda "el desarrollo de un sistema de protección social", y la mejora de la calidad educativa y de la salud "desde una perspectiva de igualdad de oportunidades y de equidad de género".

Soriano dice que Chile está en la categoría de "país preferente", porque si bien "tiene los mejores índices de crecimiento macroeconómico de América Latina, también tiene uno de los peores índices de distribución de la riqueza, por lo que es necesario trabajar conjuntamente con las autoridades chilenas en la consolidación de políticas públicas encaminadas a la reducción de las desigualdades".