Asimismo, advirtió de que, en el proceso de paz, "la pelota no está ni en el tejado de ETA ni en el de la 'kale borroka'", sino en el de los partidos políticos y en el Gobierno central, que deben "cesar sus agresiones" contra la izquierda 'abertzale'.
Otegi tomó la palabra ante el Ayuntamiento de Bilbao al término este sábado de una marcha en favor de la autodeterminación, que reunió a miles de personas en la capital vizcaína, entre las que se encontraban varios miembros de Batasuna y de la izquierda 'abertzale'.
El portavoz de Batasuna exigió "a los responsables de la represión que cesen los ataques del Estado a la izquierda 'abertzale'" y añadió, en referencia a las declaraciones de la vicepresidenta del Gobierno, María Teresa Fernández de la Vega, que la izquierda 'abertzale' tampoco "admite ni tutelas, ni chantajes, ni condiciones, ni pone encima de la mesa ningún pulso".
"Sólo ponemos encima de la mesa un reto: señores del Gobierno español, y señores de las fuerzas políticas como el partido socialista, atrévanse a dialogar política y públicamente con la izquierda 'abertzale' en un diálogo multilateral y atrévanse a decirle a este país cuál es realmente su alternativa, cómo piensan ustedes solventar el conflicto", indicó.
Además, pidió a los socialistas que expliquen "cómo piensan que es posible construir un proceso de diálogo político cuando una de las partes no está en condiciones de igualdad y cuando a una de las partes no se le respeta". En esta situación, advirtió, "sencillamente no es posible" el proceso de diálogo, algo que desde la formación abertzale "vienen denunciando estos últimos meses".
"Crisis y bloqueo"
Por otro lado, reiteró que el proceso de paz y normalización política atraviesa un momento de "crisis y bloqueo", ante lo que planteó dos necesidades: por un lado "que se deje de una vez por todas de lanzar pelotas a los tejados de ETA, de la 'kale borroka', a los tejados de no sabemos qué...".
Por otro, que se reconozca que "hoy, la pelota está, en primer lugar, en las direcciones de los partidos políticos de Euskal Herria, y en segundo lugar, en el Gobierno español, para que cese, de una vez por todas, todas las agresiones a la izquierda 'abertzale'".
Las críticas de Otegi al Gobierno central también se centraron en lo que él calificó como "falta de valentía política" para afrontar el proceso, que precisa, añadió, "ambición política histórica, voluntad, determinación y correr riesgos para cerrar un conflicto de siglos".
En este sentido, apostó por la necesidad de realizar "un esfuerzo" para "dejar a las futuras generaciones un escenario de solución democráticas".
"Raíces del conflicto"
El portavoz de Batasuna enumeró "las raíces de conflictividad histórica en Euskal Herria", que pasan por los debates sobre "vertebración territorial, la geografía del conflicto", sobre el derecho a decidir y sobre "por qué ininterrumpidamente los estados utilizan la crueldad y la represión contra los rebeldes vascos y vascas".
Por otro lado, explicó que, "como siempre", la izquierda 'abertzale' está "comprometida con la superación del conflicto, hasta el final", sin olvidar que "no suscribirá ningún acuerdo que no contenga un mínimo marco democrático ni de solución".
Asimismo, el discurso de Otegi finalizó con un recuerdo "cariñoso" con los familiares de presos, los afectados por el proceso 19/98, "con los que están en las cárceles y los que están en el exilio" y con el preso de ETA Iñaki de Juana Chaos, del que leyó una carta en la que el recluso reflexionaba sobre que "cuanto más difíciles están las cosas, más hay que estar".
La marcha partió pasadas las cinco de la tarde de la plaza Aita Donosti de Bilbao, en cuyas inmediaciones, colgada de un puente, se podía ver una pancarta de grandes dimensiones con el mensaje "Iñaki de Juana Askatu" (Iñaki de Juana, libertad).
La manifestación discurrió con gritos a favor de la independencia y de los presos. Entre los congregados, se encontraban otros miembros de Batasuna, como Joseba Permach, Joseba Alvarez o Pernando Barrena, así como el secretario general de LAB, Rafa Díez Usabiaga, y el portavoz de Askatasuna, Juan Mari Olano.
"Euskal Herriak autodeterminazioa"
Entre un amplio dispositivo de la Ertzainza, los manifestantes iniciaron la marcha desplegando una pancarta en la que se podía leer "Euskal Herriak Autodeterminazioa", precedida de una gran ikurriña.
La manifestación no había sido prohibida por el magistrado de la Audiencia Nacional Baltasar Garzón, quien ayer dictó un auto en el que justifica esta decisión, al considerar que "no consta que tenga relación orgánica con Batasuna".
No obstante, ordenó a la Ertzaintza que incoe diligencias policiales si se "quebrantan los límites de la autorización" y que impida la aparición de símbolos o lemas vinculados, "directa o indirectamente", con Batasuna, ETA o cualquier otra organización ilegalizada.
Precisamente, momentos antes de iniciarse la marcha, agentes de la Policía Autónoma comunicaron a la dirigente de Batasuna, Jone Goirizelaia, las ordenes del magistrado sobre cómo debía transcurrir la manifestación.
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