La Audiencia Provincial de Madrid ha absuelto a un agente de Policía Nacional que hirió accidentalmente a un hombre, que presuntamente estaba robando en el interior de varios vehículos. El agente lanzó un disparo de advertencia, pero la bala rebotó en el suelo y alcanzó el brazo derecho del acusado.
El herido, Stefan R. se encontraba el 28 de noviembre de 2004, sobre las 5.00 horas, en compañía de Dimitri P., presuntamente robando en el interior de cinco coches, delito del que también han sido absueltos por falta de pruebas. El escrito de conclusiones definitivas del Ministerio Fiscal considera probado que ese día dos agentes de la Policía Nacional fueron comisionados para que se dirigieran a la confluencia de las calles Castillejos con Oudiz y Was Ras, en la que se encontraban dos personas forzando los vehículos allí estacionados.
Cuando llegaron al lugar -continúa el escrito- uno de los agentes realiza un rodeo con el vehículo policial, mientras que el otro camina a pie por dichas calles. Éste último escuchó un fuerte ruido y v io a los acusados, Dimitri P. y Stefan R. apoyados en un vehículo, por lo que se dirigió a identificarlos, instante en el que comienzaron a huir. El agente les dio el alto policíal y los dos procesados se detuvieron, pero inmediatamente después se dirigieron hacia el policía.
En ese momento, el agente desenfundó su arma y les gritó que se tiraran al suelo, orden que fue obedecida inmediatamente por Dimitri P., no por Stefan R. que prosiguió avanzando hacia el policía. Ante este hecho, el agente disparó un tiro de advertencia que rebotó en el suelo y alcanzó el brazo derecho del imputado. Stefan R. estuvo ingresado seis días en un centro hospitalario y tardó en curar de sus heridas 60 días.
En las calles citadas se encontraron cinco vehículos forzados, de los que se sustrajeron diversos objetos y en los que ocasionaron graves desperfectos. Dimitri P y Stefan R. estaban acusados de un delito de robo con fuerza en las cosas, para los que solicitaban tres años de prisión. Además, Stefan estaba acusado de un delito de atentado por el que pedían dos años y medio de cárcel. Por su parte, el agente de Policía Nacional estaba acusado de un delito de lesiones imprudentes, concurriendo la circunstancia eximente de responsabilidad criminal de legítima defensa, por lo que se solicitaba su libre absolución.
El documento jurídico señala que, tras las investigaciones pertinentes y el juicio oral, no ha quedado acreditado el delito continuado de robo con fuerza en las cosas por parte de Dimitri P. y Stefan R., ya que "las pruebas no han resultado suficientes" para "enervar la presunción de inocencia que constitucionalmente ampara a los acusados".
Así, el tribunal alega "que no sólo los dos procesados negaron los hechos" durante la vista oral, sino que los policías que acudieron hasta el lugar de los hechos "vieron triángulos, casetes y diversos objetos fuera de los vehículos forzados", pero no vieron "a ninguno de los imputados forzar vehículo alguno". "La prueba practicada no ofrece la contundencia, claridad y fiabilidad necesarias para desvirtuar el principio 'in dubio pro reo' (en caso de duda, a favor del reo), por lo que procede su libre absolución", concluye el escrito.