Tasas carroñeras

Supongo yo, amadísimos, globalizados, megaletileonorisofiados y tasados niños y niñas que me leéis, que la última idea de los encapuchados bajo txapela les parecerá de lo más razonable a los contables de la Mafia siciliana, la Camorra napolitana la N’dragueta calabresa (o sea, di la Calabria) e, incluso, hasta al tesorero de la liga Norte de Umberto Bossi.

La desaceleración económica ha llegado hasta a las finanzas de ETA. Su departamento comercial –por llamarlo de alguna forma—se ha encargado de vender protección (si pagas –dicen—no te destrozamos el negocio), pero eso sí, en cómodos plazos. Eso es lo que, según mi cuñado Koldo Natxo (de Neguri y del PNV de toda la vida de Jaun-goikoa, o sea, Dios), dicen las misivas recaudatorias. Han fijado una cuota entre 50.000 y 70.000 euros, que puede ser abonada en anualidades de 6.000 €, en función –faltaría más— de las disponibilidades de tesorería del así conminado a rascarse la caja para mantener una Euskal Herria Una, Grande y Libre.
 
De la misma forma que el Ministerio de Hacienda del Reino de España, con la sana filosofía de apretar pero no ahogar, tiene previsto liberar de tributaciones, cargas, gabelas y sanciones las cantidades que, procedentes de paraísos fiscales, se inviertan en Bonos del Tesoro, Obligaciones del Estado y/o Letras del Tesoro, la Dirección General de Finanzas de ETA, aprovecha el mes de abril para lanzar su campaña de recaudación. Y ya es casualidad, pequeñines/as míos/as, que la campaña coincida con la que, como cada año, inicia la Agencia Tributaria para haceros declarar por el IRPF. A esto se llama armonizar los respectivos calendarios fiscales, ¿verdad?.

Si Mafia, Camorra, N’dragueta y Liga Norte llevan años profesionalizando su sistemas económicos-financieros, no es de extrañar que los encapuchados bajo txapela hagan tres cuartos de lo propio. Si el Partico Comunista Chino (¡pobre de Mao Tse Tung, el Gran Timonel, si levantara la cabeza!) apuesta por el capitalismo en nombre del pueblo, para el pueblo pero sin el pueblo, los que luchan por una Euskadi Libre y Socialista no van a ser menos. Porque un Estado moderno –piensan—no es nada si, junto con las armas, no tiene capacidad recaudatoria.

Claro que, mientras la Mafia, la Camorra y la N’dragueta, en materia de extorsión económica digamos que pertenecen a la Escuela Liberal, ya que actúan como iniciativa privada, en un mercado de libre concurrencia (este método, por cierto, pequeñines/as míos/as, ya se sigue en la Comunidad de Madrid, donde su lideresa sabe darle a lo privado todo su valor), los etarras aún andan en fase mafioso-carroñera a la hora de allegar fondos para su causa. Aún no han salido de las tasas comunistoides como aquel que dice.

Pero no desesperéis, que todo se andará. Llegará un momento en el que hasta la dirección de ETA comprenderá los beneficios, dentro de una economía globalizada, del método liberal. Lo de socializar el terror es agua pasada, una antigualla impropia del siglo XXI. Ahora se llevan otros métodos recaudatorios. La persuasión al contribuyente pasa por facilitarle la vida tributaria. En este aspecto, Hacienda lleva dos ejercicios discales montándoselo de cine, a base de enviar millones de borradores de la declaración del IRPF. Y la gente traga que es un contento.

Aunque, amadísimos/as de mi paterno corazón, quizá el Sanedrín etarra debería pensar en aflojar un poco la presión fiscal. Por ejemplo, admitiendo las declaraciones con derecho a devolución o deflactando la escala del Impuesto Revolucionario y permitiendo la desgravación. O eso, o devolviendo 400 euros a cada contribuyente, como el buenazo de ZetaPé.