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En el inicio del seminario

Cristina pidió apertura para  pensar distinto

Cristina pidió apertura para pensar distinto

martes 29 de abril de 2008, 06:05h
Cristina Fernánde regional de la Alianza de Civilizaciones

La presidenta Cristina Fernández de Kirchner invitó ayer a "atreverse a pensar diferente" y ver al otro, al que es distinto o piensa distinto, no como un adversario o un enemigo, sino como "parte de la condición humana".

Al inaugurar en el palacio San Martín de la Cancillería el seminario regional de la Alianza de Civilizaciones sobre la postergación de la mujer en el desarrollo internacional, la Presidenta dijo que el encuentro se inscribe en el concepto de "articulación de civilizaciones", que reemplaza al viejo concepto de choque de civilizaciones.

Cristina invitó a "atreverse a pensar diferente" y ver al otro, "al que es distinto o piensa distinto, no como un adversario o un enemigo sino como parte de la condición humana".

En este marco habló de la intolerancia hacia el otro y dijo que "no es una cuestión de raíz religiosa o de género, sino que quizá está en la propia condición humana, de no tolerar al otro que es diferente, que piensa diferente, reza diferencia o que vive diferente".

La presidenta Fernández de Kirchner también se refirió a la discriminación hacia la mujer y lo graficó con cifras a las que calificó de "escandalosas".

Dijo que el 70 por ciento de la población no escolarizada infantil del mundo son niñas y que dos terceras partes de los 960 millones de adultos que no saben leer son mujeres y que tres quintas partes de los 1.000 millones de pobres del mundo también pertenecen al género femenino.

Pero aclaró que esta discriminación "no sólo se da a este nivel sino también cuando la mujer ocupa un lugar en el sistema de poder" y citó el caso de la política europea que recibió fuertes críticas de la prensa del Viejo Continente por haber lucido un escote.

"El otro día me tocaba ver como se escandalizaba la prensa por el escote que llevaba una política europea, y sin embargo nadie se escandalizó nunca por la calvicie de un político", dijo al tiempo que calificó la actitud hacia la funcionaria de "mediocre".
Asumió en este marco que "puede haber pueblos o sociedades que no quieran vivir según las formas" que proclama Occidente como de "carácter universal o uniforme, con democracias en la que existe la división de poderes y en la que la religión está separada del Estado", y planteó como desafío "respetar" las formas de organización diferentes.

"Es un desafío a la inteligencia el hecho de entender que puede haber sociedades, culturas y pueblos que elijan otras formas de relacionarse, de vivir y, fundamentalmente, de organizarse.

Nosotros deberíamos respetar esas formas diferentes a la nuestra", dijo.

Reconoció en el jefe de Gobierno español José Luis Rodríguez Zapatero el objetivo de "admitir al otro, al que piensa diferente, al que vive diferente, al que se organiza diferente, al que reza diferente" cuando en 2004 lanzó la idea de este seminario en las Naciones Unidas.

"Es una apuesta a la inteligencia, al pensamiento, al intelecto profundo, y creo que las mujeres somos las que podamos dar con mayor fuerza este desafío porque muchas veces somos víctimas de esta falta de intelecto, de inteligencia, y de esa mayoría, por momentos, agobiante de mediocridad, que parece rodear hoy al mundo contemporáneo".

"En Occidente tenemos inclinación a que nuestras categorías de pensamiento sean tomadas en forma monocorde y universal por todos y lo cierto es que frente a estas hay otras que, quizá, sean más antiguas que las nuestras", reseñó.

En Occidente "existe cierta idea de colonización cultural, mas allá de la militar o territorial, para imponer una idea propia", añadió.

Y consideró que este debate "es fantástico, desafiante, porque significa desprenderse de ideas enlatadas y tener la valentía y apertura intelectual de atreverse a pensar, a mirar y a sentir diferente".

"Este seminario constituye un instrumento un elemento muy importante para comprender que esto de la discriminación, este choque hacia el otro, no sólo es un producto de las culturas, religiones o historias diferentes, sino que anida en la misma condición humana", manifestó Cristina.

Asistieron el canciller Jorge Taiana; el ministro de Relaciones Exteriores de España, Miguel Angel Moratinos; el representante de las Naciones Unidas (ONU) en la Alianza y ex presidente de Portugal, Jorge Sampaio; y el director general de Asuntos Multilaterales del Ministerio de Relaciones Exteriores de Turquía, embajador Hasan G"güs.

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