"Qué mejor que el pueblo decida el destino del país", dijo Morales en un mensaje a la Nación televisado, al tiempo de anunciar que está a la espera del proyecto de ley aprobado este mismo jueves por el Congreso.
El mandatario resaltó la necesidad de "definir en las urnas y no con violencia, en el marco de la constitucionalidad", la actual crisis política que afecta al país y que mantiene enfrentados al gobierno central con algunas regiones rebeldes.
El gobernante se declaró "muy contento, muy satisfecho" por la convocatoria. Es "algo que deseaba se va a cumplir: sólo someternos al pueblo boliviano", resaltó.
Morales únicamente lamentó que el Senado, dominado por la oposición, haya decidido cinco meses más tarde de haberlo solicitado el Ejecutivo dar luz verde a la convocatoria.
Los mandatos de Morales y de su vicepresidente Alvaro García Linera, que concluyen en enero de 2011, podrán ser revocados si se superan los votos recibidos por ambos en plancha en las elecciones de diciembre de 2005, que fueron el 53,74% del total.
La misma lógica se aplicará para la revocación de los prefectos de La Paz (oeste), Santa Cruz (este), Cochabamba (centro), Tarija (sur), Chuquisaca (sureste), Potosí (suroeste), Oruro (oeste), Beni (noreste) y Pando (norte).
Contra todo pronóstico -que preveía que Morales ejercería su derecho al veto-, el gobernante se dijo satisfecho por "ir al referéndum (..) por la unidad del país, (..) por respeto a la legalidad, respeto al estado de derecho y sobre todo por respeto al Congreso nacional".
"El pueblo que nos diga quién sirve y quién no sirve para gobernar", señaló tras agregar que "con esta pequeña experiencia de dos años de presidente queremos seguir sirviendo más todavía, pero el pueblo nos juzgará".
En dos años de mandato, Morales nacionalizó los hidrocarburos, estatizó en gran medida la minería y tiene previsto redistribuir las tierras ociosas a los campesinos.
La consulta de revocación de mandatos se da en momentos en que una región -Santa Cruz- acaba de realizar un referéndum buscando consagrar su autonomía sobre el gobierno central, en tanto otras tres regiones --Tarija, Beni y Pando-- están en proceso hacia respectivos referéndums.