Van der Vaart superó con éxito por la mañana el pertinente reconocimiento médico antes de firmar su contrato por las próximas cinco temporadas en la Sala Juntas del coliseo madridista. El holandés llegó a las 9.00 horas al Hospital Sanitas La Moraleja, donde se le han realizado durante casi tres horas "una serie de pruebas complementarias.
"No hay ningún problema en ese sentido porque durante los últimos dos o tres años no ha tenido ningún tipo de lesión, ha estado jugando perfectamente en el Hamburgo y está ya a disposición del míster para que decida con él lo que crea conveniente", comentó el Jefe de los Servicios Médicos del Real Madrid, Carlos Díez, a la televisión del club.
Calidad y talento para la medular
Rafael recibió de manos del presidente de Honor del Real Madrid, Alfredo di Stéfano, su nueva camiseta, aún sin número, con la que instantes después saltó al césped para realizar sus primeros toques con el balón para el deleite de los aficionados que acudieron al coliseo blanco a la presentación.
Además, su hijo Damián, su esposa Sylvie, y sus abuelos, naturales de Chiclana, también quisieron saltar a la hierba del Bernabéu para posar para los fotógrafos y saludar a los seguidores.
Calderón elogió al mediapunta holandés, "un jugador de extraordinaria calidad, gran visión de juego y talento, que va a ayudar muchísimo" al equipo. Mientras, Van der Vaart cerró el acto con una palabras en castellano, lengua que apenas habla, pese a que su familia materna es gaditana. "Gracias presidente, no hablo muy bien español. Estoy muy contento, jugando en el mejor equipo del mundo, era un sueño también por mi familia. Gracias a todos, quiero ganar muchas copas y ¡Hala Madrid¡", expresó el ex del Ajax y el Hamburgo.
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