Muchas noticias, pocos ‘confis’ y alguna que otra genuflexión

La muerte de Érika (“con acento en la ‘E’…” están repitiendo hasta la saciedad los cronistas de la prensa rosa); el anuncio del nombramiento de Mariano Fernández Bermejo como próximo ministro de Justicia; la compra de Recoletos por parte del grupo de comunicación RCS MediaGroup, editor de El Mundo; la nueva propuesta de Batasuna… se fueron sucediendo ayer una tras otra a lo largo de todo el día y hoy las recogen con gran despliegue tipográfico los periódicos y amplios espacios en las tertulias de radio y televisión. No hay un solo medio que no cite estas cuatro noticias. Hoy, si no escribes diciendo que hubo una vez un día que coincidiste con la difunta hermana de Doña Letizia, no pones literalmente a caldo a Fernández Bermejo, no hablas del creciente poder mediático de Pedrojota, o no pontificas sobre el ‘proceso de paz’, Otegi o ETA, no eres nadie.

Bueno hay una excepción que confirma esta regla: la Blogosfera ‘passa’ olímpicamente de Érika Ortiz Rocasolano, me cuenta esta mañana mi admirada ‘blogger- periodista’ Rosa Jiménez Cano, que ha echo un recorrido ‘de urgencia’ por los blogs.

¿Y qué cuentan hoy los confidenciales digitales? Pues todos dedican amplios espacios a la muerte de Érika; el anuncio del nombramiento de Mariano Fernández Bermejo como próximo ministro de Justicia; la compra de Recoletos por parte del grupo de comunicación RCS MediaGroup, editor de El Mundo; la nueva propuesta de Batasuna… y algo más sobre el asesino Iñaki de Juana Chaos (hay a quien le molesta mucho que siempre me refiera a él llamándole asesino, cosa que no pienso dejar de hacer porque lo es: tengo 25 razones para decirlo).

Por eso hoy sólo destacaré unos pocos titulares que me han llamado la atención: “La Conferencia Episcopal estudia hoy la continuidad en la COPE de Coronel de Palma y la renovación de F.J. Losantos” (El Confidencial: llama la atención porque esto ya se sabía)¸ “Iñaki de Juana Chaos se muestra eufórico en el Hospital Doce de Octubre por el éxito de propaganda conseguido con sus fotos” (El Confidencial Digital: es obvio. ¿Se publicarán las otras 20 ó 25 fotos que dice este ‘confi’ que le hicieron al etarra?); “Zapatero pone a los guardias civiles de su escolta contra la pared” (Garganta Profunda  dice en El Semanal Digital que “llevan meses sin cobrar las dietas y pluses por sus desplazamientos y horas extraordinarias”); “La derecha trata de vincular la entrevista a De Juana con el Gobierno” (El plural, que dice que “obvian la relación de Aznar con The Times”) o “Aznar: "Una alianza de extremistas quiere expulsar al PP del sistema” (El plural, again…)

No menciono lo que cuenta Hispanidad sobre unos supuestos hechos acaecidos durante la visita del Rey a Alemania, porque se trata de una noticia desmentida por la Casa Real y este ‘confi’ ha tenido tiempo de rectificarla, y no lo ha hecho (el desmentido se hizo a primera hora de la tarde, e Hispanidad renueva su información cada día a las 15:15 horas).

He dejado para el final este otro titular, de PRNoticias: “Urbaneja pide prudencia y respeto a los periodista con Erika Ortiz”. Se refiere a que el presidente de la Asociación de Periodistas de Madrid y presidente de la Federación de Asociaciones de Periodistas de España, Fernando González Urbaneja, “ha hecho un llamamiento a los profesionales de los medios, especialmente a los directores de las televisiones, para que marquen unas líneas claras de lo que no se debe rebasar”.

Pero vamos a ver, “lo que no se debe rebasar” no debe ser rebasado ni con Érika Ortiz ni con nadie, así que el llamamiento está de más, señor González Urbaneja, salvo que lo que lo que subyazca sea que la hermana de la Princesa Letizia debe tener unos privilegios sobre el resto de ciudadanos por el hecho de ser hermana.

Hoy se han producido algunos debates y comentarios en las tertulias de radio sobre esa “prudencia” y ese “respeto” que ha pedido la Casa Real y secundado el presidente de la APM. Los derechos de Érika son exactamente los mismos, ni más ni menos, que los del resto de los mortales. ¿Por qué los medios nos cuentan con todo desparpajo que tal maltratador ha asesinado a su mujer y luego se ha suicidado; por qué nos dicen, por ejemplo, que tal o cual soldado, policía o guardia civil se han quitado la vida “con su arma reglamentaria” sin plantearse duda deontológica alguna, y de Érika no se puede decir que ha abandonado voluntariamente este mundo, si es que efectivamente ha muerto así?

Lo que hay que ser es riguroso en la información y muy respetuoso con la persona y sus familiares, sobre todo porque tiene una hija de seis años a la que hay que cuidar especialmente no por ser ella, sino por ser una niña. Y ya está. Lo demás son actitudes sonrojantes, genuflexas, rebosantes de ridícula, patética y provinciana pleitesía.