McCain y Obama juntos en NY en la “Zona Cero”

John McCain y Barak Obama hicieron a un lado las hostilidades electorales que a final de cuentas los habrán de llevar a uno sólo de ellos a la Casa Blanca, para hacer una anunciada aparición conjunta en la Zona Cero sobre la que hasta el final planeó el suspense.

Alegando siempre razones de seguridad se prolongó la incógnita sobre si harían la visita realmente juntos y sobre si hablarían. Finalmente el suyo fue un descenso sin palabras por la rampa de la memoria más dolorosa.

Obama y McCain llegaron acompañados del alcalde de Nueva York, Michael Bloomberg, con el protocolo justo y horas más tarde de que finalizara la conmemoración oficial, con la lectura de los nombres de las 2.751 víctimas –una más de las reconocidas el año pasado- en el Zucotti Park, a una esquina del antiguo World Trade Center.

“Hace siete años nuestro mundo quedó roto por una tragedia que nos unió para siempre en una memoria común y una historia común”, había dicho Bloomberg. Obama y McCain prefirieron emitir comunicados a primera hora del día.

El de Obama evitaba toda mención de la guerra de Irak y parecía un “decíamos ayer” respecto al día siguiente a los atentados, cuando América era una piña de horror, solidaridad y sacrificio. El candidato demócrata abogó por la recuperación de ese espíritu. Asimismo recordó que los terroristas responsables del 11-S aún andan sueltos y deben ser puestos ante la justicia. “Vamos a buscar el renacimiento de la libertad aquí y en el resto del mundo”, concluyó.

McCain, quizás para eludir participar en el minuto de silencio guardado en la Casa Blanca por el presidente George W. Bush, el vicepresidente Dick Cheney y sus respectivas esposas, viajó a primera hora de la mañana a Shanksville, Pennsylvania. Allí participó en las honras a los pasajeros del vuelo United Flight 93. Su discurso ponía el acento en el heroísmo de sacrificar la propia vida para defender la de los compatriotas. “Este es un amor tan sublime que sólo lo supera el amor de Dios”, proclamó, citando el Evangelio según San Juan.

Agenda electoral intensa

Con lo cual los dos presidenciables ya lo tenían todo dicho cuando llegaron a Nueva York, donde a pesar de la suspensión de los anuncios de campaña mantuvieron una agenda electoral intensa. Obama grabó el día antes una entrevista con la NBC y ayer se reunió en privado con el expresidente Bill Clinton. Este también despachó con representantes de familias de las víctimas del 11-S, a las que prometió que él y su esposa trabajarán por desbloquear ayudas prometidas y pendientes.

McCain también aprovechó para grabar algunas intervenciones televisivas. Al caer la tarde volvió a encontrarse con Obama en un foro presidencial televisado en la Universidad de Columbia, en el que se repitió la dinámica de la Zona Cero: los dos candidatos coincidieron en el espacio pero no en el tiempo, hablando por riguroso turno, y jamás entre ellos.