Más verdades

Las elecciones celebradas hace unos días, relacionadas con más-menos ayuntamientos y comunidades en disputa… han tenido unos resultados que tampoco resolverán los problemas prioritarios que de forma y de fondo tiene la mayor parte del público-pueblo español…incluidos catalanes y vascos.

Los problemas prioritarios, es solucionar, o al menos, es ir por la ruta de la dignidad-justicia social genéricas. Basta ya de cinismos-egoísmos más-menos blanqueados.

Los resultados, en principio, han dado un vuelco con respecto a los últimos-penúltimos X años.

La propaganda de unos más que de otros, no ha respetado en las urnas algunos logros evidentes de ex alcaldes-ex presidentes. Y los hay que seguirán en el más de lo mismo o peor. Lo que ha calado hasta el tuétano en una parte volátil de la sociedad española, es decir a todas las horas, de todos los días, haya o no elecciones a la vista… que teníamos-tenemos un gobierno socialista-comunista-independentista-terrorista… según los “voceros-triunfadores” de las elecciones. Ese ha sido su falaz, torcido, mal nacido y único discurso del “éxito” obtenido. Y es verdad que el resultado de la “izquierda” es penoso.

El posible próximo presidente de cara-cruz estreñida se ha limitado a repetir-repetir los peligros del “sanchismo”… y en principio a rechazar pactos con su hermano VOX. Sí, las amenazas-mentiras, más de unos que de otros, también han estado a la orden del día. Y luego añade cuatro o cuarenta bobadas más. No, no hay una alternativa-propuesta con un mínimo de creatividad-credibilidad a lo dicho-hecho por el “sanchismo”.

Y sin embargo señala que estamos muy cerca del borrón y cuenta nueva. Pronto sabremos a que se refiere, y pronto comprobaremos que va a seguir dando la tabarra a través de una tal Gamarra para volver a los fracasadísimos métodos de su formación cuando fueron gobierno. No, no van a poner freno a la desigualdad sin límites; a chapuceros-engañosos acuerdos laborales; a la precariedad cultural-económica-social de la mitad o más de ciudadanos; a la sobre explotación sin miramientos de la Tierra-Naturaleza; no van a poner freno a la letal consecuencia del cambio climático; van a dar más avales-privilegios a “creadores de riqueza” que ni fueron ni son-serán capaces de reducir las escalofriantes cifras de miseria-paro; no pondrán freno al criminal negocio privadísimo de la vivienda-alimentación; habrá mucho más dinero para armas que para almas, etc., etc., …eso sí, pondrán dudosas medallas al por mayor a “deportistas-artistas-elitistas” de esto o de lo otro y de su cuerda… sin ton ni son.

La verdad más verdadera de las últimas elecciones, y seguramente de las próximas, es que si a las abstenciones sumamos los votos en blanco, los votos nulos, y restamos los votos comprados-vendidos, los votos repetidos-tramposos, los votos dirigidos-manipulados-obligados de asilos, residencias de ancianos o sectas, etc., resulta que cuatro de cada diez posibles votantes han pasado-pasan de elecciones poco aleccionadoras para su presente-porvenir. La rudeza del pasado sigue practicando la crueldad en lo económico.

Ni siquiera la llegada de VOX, y de PODEMOS han conseguido mayor participación electoral. Es decir, en la solución económica, que es la prioridad de todas las prioridades, estamos como estuvieron-están de 1.939 a 1.975… y de 1.975 hasta hoy. Ha cambiado el régimen, pero el ultra capitalismo sólo ha cambiado de la caspa a la casta y al revés también.

Sí, si hay más libertad y más oferta-demanda de la que había…pero ¿por qué, de qué, para qué-quién?

Más verdades, ni el cara-cruz estreñida, ni el “sanchismo”, ni el sistema ultra capitalista establecido, con un “éxito” de 6-4, que en cualquier momento puede cambiar el marcador electoral…tiene autoridad legal-moral para hacer-deshacer como si de la totalidad del público-pueblo se tratara.

Para muestra dos botones:

1. La desahogada -“triunfadora”, I.D.A., presidenta de la Comunidad de Madrid va por la vida creyéndose, o haciéndola creer que es Cleopatra.
2. El dicharachero-“triunfador”, J.L. M-A, alcalde de Madrid va por la vida creyéndose, o haciéndole creer que es Marco Antonio.

¡Y cómo acabaron los dos!