El conseller de Educación,
Ernest Maragall, consideró
"inadmisible" que los principales sindicatos de enseñanza quieran "
declarar la guerra" a la futura ley catalana de educación, e insistió en que él no tiene
"enemigos", y menos entre los profesores de Catalunya. Antes de pronunciar estas palabras, medio centenar de delegados sindicales le recibieron pidiendo su dimisión y que no se privatizase la escuela catalana.
Para Maragall, las movilizaciones que los sindicatos de enseñanza han convocado para el 14 de febrero contra la aprobación de la futura Ley de Educación de Catalunya (LEC) responden a que "
hay quien necesita declarar la guerra" y construirse
"frentes donde no los hay".
"Yo no tengo enemigos ni quiero hacer la guerra", dijo, y confió en contar con el profesorado para "
tirar adelante" su proyecto.
Maragall deseó que la comunidad educativa, a quien presentó las bases de la LEC en el CaixaForum de Barcelona, sea capaz de
"encontrar espacios de diálogo" para llegar a un consenso sobre la futura normativa.
Sin embargo, aseguró entender "
el escepticismo y la preocupación" de los más críticos con la ley, ya que han vivido "
muchos años de una determinada realidad", en alusión a los pasados gobiernos, que les provocó una sensación de "
soledad".
Maragall anunció que el departamento que dirige dispone de "
bastantes centenares" de propuestas sobre la futura LEC recibidas de la comunidad educativa, por lo que consideró que el "
debate está bien vivo". Además, valoró las reivindicaciones y las quejas, ya que aportan elementos para la "
reflexión".
"No a la privatización"
Medio centenar de delegados de los principales sindicatos de enseñanza --Ustec·Stes, CC.OO., Aspepc·Scs, UGT y CGT--- recibieron al conseller a su llegada al edificio de CaixaForum con gritos de "
No a la privatización" y "
conseller dimisión".
El miembro del Secretariado General de Ustec·Stes,
Ricardo Rodilla, explicó que la LEC provocará "
años de confrontación con el profesorado catalán" si el conseller llega a
"imponerla". "
Él puede imponerla, pero deberá desarrollarla, y para eso nos necesita", le recordó.
Los concentrados le recibieron en las puertas del edificio tras negarse a obedecer a los agentes de los Mossos d'Esquadra cuando les pidieron que se alejasen de la entrada. Los delegados sindicales se situaron tras una pancarta en la que reivindicaban "
una escuela pública y de calidad".
El portavoz de la Federación de Enseñanza de Fete-UGT, David Medina, aseguró que con el sistema recogido en las bases de la LEC (la única parte de la ley dada a conocer a la comunidad educativa), se pasará a "evaluar la educación en términos de "productividad".
Así, según Medina, se dejará a la familia que haga "la inversión en educación que su economía permita", haciendo que las escuelas pasen de ser instituciones a ser empresas y poniendo "en el mercado" la enseñanza.
"Huelga general de la educación" Pública y privada
La secretaria general de Enseñanza de CC.OO., Montse Ros, señaló que las bases de la normativa afirman que se "estimulará la presencia y el crecimiento de la escuela concertada", en lugar de "consolidar la red pública", como establece el Pacto Nacional por la Educación (PNE). "Ni sus propios compromisos son capaces de cumplir", lamentó.
Además, establece cambios en el modo de contratación de profesorado, que pasará de obedecer a criterios "subjetivos". "Se anuncian estos cambios sin ninguna garantía de que supondrán una mejora de las condiciones", criticó. Por todo ello, pidió que el día 14 sea una "huelga general de la educación" en Catalunya.
Principios de la ley
La ley prevé la escolarización obligatoria será a partir de los tres años y no los seis como hasta ahora; que los profesores noveles tendrán que pasar un
"período obligatorio de prácticas" antes de formar parte del sistema educativo y que se "
profesionalizará" la figura del director, una de las reivindicaciones más repetidas por el sector en los últimos años.
Maragall explicó que la nueva Ley se estructurará en tres ideas básicas: aumentar la autonomía de los centros; reforzar la figura del director e intensificar los mecanismos de evaluación del sistema educativo. La Ley prevé además la creación de un nuevo Instituto de Evaluación de docentes y centros que complementará a las inspecciones escolares.
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