Todos contra ZP

Se han vuelto las tornas: ahora, son todos contra el PSOE. Todos los oradores de los grupos parlamentarios, contra Zapatero. Rajoy estuvo contundente, recuperados, parece, los viejos bríos. Los demás, implacables; todos le tendieron la mano, aunque lo primero que tendrá que hacer es reconocer que existe crisis. Zapatero trató de salvar los muebles, aludiendo reiteradamente a la fortaleza de la economía española, aunque admitiendo la existencia de malos datos (hubiese sido imposible negarlos, desde luego).

Pero ZP sigue remiso a admitir una ayuda que pasa primero, claro, por un reconocimiento de algo cercano al fracaso. Aunque ese fracaso venga dado por factores internacionales más una infraestructura económica deficiente (excesivo peso de la construcción). Estuvieron mejor los otros, sobre todo Rajoy. Zapatero sigue instalado en el más rosado de los mundos, aunque ese mundo suyo ahora tenga algún contratiempo que a él le parece, da la impresión, menor. Seguramente, al consumidor que no llega a fin de mes no le parezca tan menor. Ni que este mundo, ahora, sea ya tan, tan bueno.