Carme Chacón, ministra de Defensa, ha venido a “desactivar” en parte la concentración de protesta de militares ante su ministerio prevista para este domingo al anunciar que el borrador del anteproyecto de Ley de Derechos y Deberes de loas militares está ya listo y que se aprobará en Consejo de Ministros a principios del año próximo.
No es menos cierto que este anteproyecto y la Ley en si misma deberían haber estado mucho antes, incluso en la legislatura pasada por mandato de una Ley Orgánica como es la de la Defensa Nacional, pero resulta curioso, según fuentes militares, que sea precisamente a la ministra que ha prometido romper ese “impasse” a la que algunas asociaciones le hayan organizado una concentración de protesta.
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Las quejas de los militares, la mayoría dentro de asociaciones profesionales, tenían dos referencia principales para sus quejas: la falta de esa Ley de Derechos y Deberes y el desarrollo de la Ley de la Carrera militar que, en su periodo de transición, perjudica a algunos de los sectores y muy especialmente a los suboficiales. Las fuentes consultadas por DiarioCrítico reconocen que en este periodo de transición hay aspectos cuestionables, pero que el hecho de unificar en una sola escala – hasta ahora había dos – es un avance histórico. Con las dos escalas, los de la Superior tenían garantizado la llegada al empleo de coronel y los de la Media solamente podían alcanzar el grado de comandante. El caso de los suboficiales es más problemático y a veces más injusto, según las asociaciones que critican la Ley.
Todo ello y el anteproyecto de Ley citado por la ministra supone, un cambio de sistema que a veces no se reconoce desde casos concretos y coyunturales, señalaron las citadas fuentes, que también reconocieron fallos en los sistemas de calificación del mando sobre el subordinado, sistema que debe ser objetivado y que hay que mirar al futuro y con una amplitud que, quienes protestan, a veces no tienen, tanto en la escala media como en la superior – procedentes de la academias de oficiales –. No obstante el régimen transitorio que prevé la Ley de la Carrera Militar es cierto que ha truncado algunas esperanzas de ascenso. Lo que si parece cierto es que cuando este periodo se termine, en las Fuerzas Armadas españolas habrá una sola escala y todos los oficiales tendrán estudios universitarios. En too caso, las fuentes consultadas de uno y otro lado echan de menos cauces de comunicación que esperan que la nueva Ley los abra, como pretende la ministra Carme Chacón.
Dicho lo anterior, las asociaciones militares que convocan la protesta tienen confianza en que haya una respuesta importante. Hasta ahora, la falta de la Ley de derechos y Deberes que regule el asociacionismo militar ha vivido en una especie de “limbo” jurídico al no tener normativa estrictamente militar y las que existen se acogen a una sentencia del tribunal Constitucional de hace varios años.
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