Los dispendios de Bono

Los planes de austeridad y ahorro que el Gobierno ha ordenado llevar a cabo en toda la administración del Estado para dar ejemplo en plena crisis económica no parecen haber hecho mella en el presidente del Congreso, José Bono.
El mes pasado de junio la Mesa del Congreso aprobó una partida nada menos que de 215 mil euros para colocar las cámaras de televisión, que están situadas en la parte superior de los extremos del hemiciclo y que son las que graban la señal institucional de los plenos, “un poquito más abajo”, según informaron a este e-Xclusivo fuentes del órgano de la Cámara Baja.
La ‘malidicencia’ de algunos diputados de la oposición atribuye este insólito detalle a la mera coquetería de Bono ya que aseguran que al presidente del Congreso no le agradaban nada los planos ‘picados’ que salían en la televisión y que dejaban en evidencia su -hasta hace poco- coronilla poco poblada y los cambios que ha ido experimentando después de un tratamiento capilar al que dicen que se ha sometido. De esta forma las cámaras a partir de ahora darán una visión más panorámica de sus señorías y nadie se fijará  en si  Bono tiene o no más o menos pelo.