www.diariocritico.com

Disculpas justas del que fuera ministro de Defensa en la etapa del accidente

Trillo comparece sólo para decir que no comparte la sentencia del Yak-42

Trillo comparece sólo para decir que no comparte la sentencia del Yak-42

> Tres años de cárcel para los militares del Yak-42 por "inventar" 30 identidades | Lea la sentencia de la Audiencia sobre el Yak (pdf)>>
> Bono prefiere no "azuzar"

martes 19 de mayo de 2009, 14:49h
La Justicia ha condenado este martes a varios años de cárcel a los militares responsables de los errores en las identificaciones del accidente del Yak-42 y ha considerado que existió una actitud dolosa, es decir, que los cargos responsables de la repatriación que han sido juzgados eran "conscientes" de que existían errores en la identificación de los cadáveres. Aunque nada se señala sobre Trillo en la sentencia, puesto que el juez no se pronuncia sobre personas no acusadas, el que fuera ministro de Defensa por entonces, está ahora en el punto de mira y los familiares de las víctimas piden responsabilidades políticas. Este ha comparecido voluntariamente en la sede del PP en Génova para reiterar su disculpas y respeto a los familiares de las víctimas pero al mismo tiempo reconoció que "tengo que respetar la sentencia, no compartirla, sobre todo aún que no es firme".
   El ex ministro de Defensa y actual coordinador de Libertades Públicas del PP, Federico Trillo, dijo que respeta, pero no comparte la sentencia del Yak-42.

   Trillo recordó que ya dicho en su momento que la actuación de quienes intervinieron en la repatriación de los cuerpos había sido "de buena fe en todo momento" y por eso dijo que no compartía el fallo.

   Además, aseguró que cuando tuvo conocimiento de los errores en las identificaciones ofreció públicamente sus "más sinceras disculpas a las familias". "Lo hizo entonces y lo reitero hoy de todo corazón", aseguró, en una comparecencia sin preguntas en la sede nacional del PP.


- Comunicado íntegro de Federico Trillo

“Se acaba de conocer la sentencia de la Audiencia Nacional sobre los 30 errores en las identificaciones de los 62 militares españoles fallecidos en el accidente del Yak 42.

Durante el desarrollo de la vista oral he guardado silencio por respeto a la Justicia, para no producir ni la menor interferencia en la culminación de un largo proceso de más de cinco años, y máxime cuando el Tribunal no consideró necesario ni mi testimonio ni el de mis colaboradores civiles.

Me impuse ese silencio frente a quienes, por el contrario, se han esforzado con contumacia en imputarme responsabilidades en un juicio paralelo en el que previamente ya me habían condenado.

Hoy, cuando la Justicia se ha pronunciado, y aun cuando la Sentencia no sea firme, me parece mi deber romper ese silencio.

Primero.- En primer lugar para reiterar, una vez más, mi respeto, mi reconocimiento y mi homenaje a las victimas del accidente: a todos y cada uno de los sesenta y dos militares que regresaban a España tras desempeñar ejemplarmente una misión internacional. Su memoria, como la de todos los militares que dieron su vida por España en el cumplimiento de su deber durante mi mandato, me acompañará siempre.

Segundo.- Desde primera hora de aquel trágico 26 de mayo de 2003, la atención de las familias de las víctimas fue la primera y principal preocupación de todo el Departamento de Defensa. Consideré mi deber viajar yo mismo a Trabzón acompañado de los mandos militares y de un equipo de médicos, también militares, para colaborar con las autoridades turcas sobre el terreno en el esclarecimiento de las causas del accidente y en la repatriación de los cadáveres de los sesenta y dos militares españoles. Los tres Jefes de Estado Mayor y el General Director de mi Gabinete Militar, quedaron encargados de contactar personalmente con todas las familias y, tras notificarles nuestro pesar por la tragedia, ponernos absolutamente a su disposición.

Pusimos todo nuestro empeño en organizar el retorno y los funerales con la máxima dignidad, sin que en ningún momento –como se ha afirmado falsamente- tuviéramos ninguna noticia sobre errores en las identificaciones, que solo empezaron a cuestionarse muchos meses después.

Desde el primer momento, creamos una Oficina de Atención a las Familias y me dirigí por escrito a todas ellas, teniendo la oportunidad de recibir también a quienes lo solicitaron.

La Comisión Internacional que investigó el accidente ratificó en sus conclusiones que la causa del mismo se debía a un error humano de los pilotos.

Tercero.- Cuando, posteriormente, tuve conocimiento de los errores encontrados en las identificaciones, ofrecí públicamente, en el Congreso de los Diputados, mis más sinceras disculpas a las familias por ese nuevo sufrimiento añadido a su dolor, y la incertidumbre que ello les generaba. Lo hice entonces y lo reitero hoy de todo corazón.

Sostuve entonces que la actuación de quienes habían intervenido en la repatriación de los cuerpos, había sido de buena fe en todo momento. No lo ha entendido así la Audiencia Nacional. Tengo que respetar la Sentencia, pero no que compartirla, máxime cuando aún no es firme. Sigo pensando que los médicos militares actuaron al máximo de sus posibilidades y en circunstancias tan dramáticas como extraordinariamente difíciles. Y espero que pueda demostrarse en sucesivas instancias procesales.

Respeto la sentencia y pido también respeto a las personas. Para ellos, militares y compañeros al cabo, también está siendo este proceso enormemente doloroso y aflictivo.

Es verdad que la justicia no podrá acabar con el dolor, pero respetarla será para todos nuestro mejor homenaje”
.
¿Te ha parecido interesante esta noticia?    Si (2)    No(0)

+
0 comentarios