Esto significa que quienes ganen más de 120.000 euros al año tributarán al 44% mientras, mientras que los que rebasen los 175.000 euros, lo harán al 45%. Salgado, que presentó las líneas generales del proyecto de Presupuestos Generales del Estado de 2011 este viernes, aseguró que los 300 millones de aumento de la recaudación por estas medidas y otras referidas a las Sicavs no recogen lo que se ahorra el Estado al eliminar la deducción por vivienda (unos 200 millones). Así, la vicepresidenta cifró en 200 millones el aumento de recaudación por la subida del IRPF a las rentas más altas, que llegaría a 300 con otras modificaciones fiscales menores.
La subida se produce en el tramo estatal, del 21,5% al 22,5% a partir de 120.000 euros; y al 23,5% a partir de 175.000 euros.
Por ejemplo, "para una base liquidable de 150.000 se tributarían 25 euros adicionales al mes, 300 euros al año", ha explicado la ministra de Economía.
Hasta ahora, el IRPF cuenta con cinco tramos: del 24% para las rentas de entre 5.050 y 17.360 euros, del 28% para los ingresos de entre 17.360 y 32.360 euros, del 37% entre 32.360 y 52.360 euros y del 43% para los ingresos a partir de este importe.
El texto también cambia la fiscalidad de las retribuciones plurianuales -como las indemnizaciones por despido o los bonus, por lo que se establece un límite máximo de 300.000 euros para beneficiarse de la reducción, que antes era del 40%-, incluye medidas para evitar que la tributación de los accionistas de las SICAV se dilate en el tiempo y flexibiliza el Impuesto de Sociedades para las entidades de reducida dimensión. En este aparrado, las entidades de reducida dimensión que pierdan dicha condición por superar el límite de 8 millones de euros de cifra de negocios, puedan seguir aplicando el régimen especial de tributación del que se benefician.
Aunque estas decisiones "no tendrán una influencia significativa en la previsión de ingresos, contribuirán a una mejor distribución de las cargas tributarias y al cambio de modelo económico", según la información remitida por el Consejo.
En cuanto a la recaudación, si a todos estos cambios se le suma la ya anunciada supresión de la deducción por vivienda a quienes ganen más de 24.170 euros al año y otras modificaciones menores para equiparar el tratamiento fiscal entre la compra y el alquiler,
Hacienda ingresará unos 500 millones de euros en total.
Capítulo de gastos
En cuanto a la contención del gasto, Salgado ha explicado que la reducción del presupuesto de los ministerios se hará con la bajada de los sueldos a los funcionarios, la reducción de la convocatoria pública de empleo, el ahorro en gastos de funcionamiento y por el impacto de las medidas de ajuste aprobadas en mayo.
Así, el techo del gasto será de 122.022 millones: es la cifra que ha dado Salgado como gasto de la Administración General del Estado, aunque recordó que las nuevas reglas de financiación autonómica no permiten hacer comparaciones con ejercicios anteriores.
Las cuentas del Estado para 2010 incluyen una subida del 1% de las pensiones mínimas y no contributivas, que son las que cobran 3,2 millones de personas, según ha confirmado la vicepresidenta,
María Teresa Fernández de la Vega. Frente a esta revalorización, la mayoría de las pensiones se congelarán el próximo ejercicio, tal y como aprobó el Gobierno dentro del plan de austeridad para reducir el déficit.
Fernández de la Vega ha enfatizado que estos presupuestos son los "de la recuperación, de la estabilidad y la confianza". También ha defendido que son unas cuentas "austeras y rigurosas".
Sobre deuda
Elena Salgado aseguró que el incremento de la deuda pública en 2011 será moderado: desde el 47,8% al 51,5%, mientras que el endeudamiento de la adminsitración central crecerá desde el 47,8% al 51,8% del PIB. La deuda será 20 puntos inferior que la del conjunto de la UE, aseguró la vicepresidenta.
María Teresa Fernández de la Vega aseguró que los PGE cumplirán el compromiso de reducir el déficit del Estado "sin dejar de proteger a los más débiles". La vicepresidenta primera recordó que se reducen un 16% los presupuestos de los ministerios.
"Vamos a exigir un esfuerzo mayor a las rentas más altas", declaró De la Vega, que dejará a Salgado el papel de desgranar los datos. "La última rúbrica la pondrá el Parlamento y trataremos de que sea con un apoyo mayoritario", concluyó De la Vega sobre los PGE.
El Gobierno ha declarado exentas de tributación las ampliaciones de capital de las empresas que denominó empresas de reducida dimensión, en principio durante 2011 y 2012, aunque se mantendrán si el Ejecutivo "comprueba que la medida ha resultado útil".
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