El grupo islamista Hamás ha asegurado que este sábado va a liberar a 6 rehenes vivos, donde está incluido el beduino Hisham Al Sayed y el israelí de origen etíope Avera Mengisto.
Son los últimos prisioneros que quedan vivos entre los 33 que tenían que ser entregados en la primera fase del acuerdo que comenzó el 19 de enero. Además, este jueves va a entregar los cuerpos de 4 secuestrados, incluidos los de la familia Bibas, la madre Shiri y los hijos Kfir y Ariel Bibas, que fueron tomados rehenes el 7 de octubre de 2023 con 9 meses y 4 años, cada uno.
"Primero, entregaremos los cuatro cadáveres de los prisioneros de la ocupación el jueves 20 de febrero, incluidos los cadáveres de la familia Bibas", ha dicho este martes el jefe de Hamás dentro de la Franja y de la delegación negociadora, Jalil al Haya.
Un oficial israelí ha anunciado a medios hebreos que este martes se llegó a un acuerdo para que salieran del enclave palestino todos los rehenes que quedan vivos, de la lista con 33 nombres pactada para la primera fase del alto el fuego, además esta semana está planteado que empiecen las conversaciones para la segunda fase del acuerdo, que llevaría a la retirada de las tropas isrealíes y el fin de la guerra.
Israel no abandona el Líbano
Por otra parte, el acuerdo de alto el fuego pactado entre Tel Aviv y Beirut en noviembre marcaba este martes 18 de febrero como el dían ene el que las fuerzas militares de Israel iban a salir del sur del Líbano. Pero el ministro israelí de Defensa, Israel Katz, ha señalado que el Ejército va a continuar en 5 puntos próximos a la frontera en la zona de amortiguación del Líbano y "continuará haciendo cumplir, con fuerza y sin concesiones, cualquier violación (del acuerdo) por parte de Hezbolá". Es algo que han advertido desde del Gobierno del Líbano que ha dicho que va a considerar como una ocupación cualquier presencia israelí que siga en sus tierras y por lo tanto han señalado a su "derecho a utilizar todos los medios para garantizar la retirada israelí".
Según los acuerdos alcanzados, Israel tendría que haber completado su retirada del sur del Líbano para el 26 de enero, pero la prorroga lo volvió a ampliar hasta este martes. En esta zona solo iba a desplegarse el Ejército libanés y las fuerzas de mantenimiento de la paz de la ONU y Hezbolá tenía que desmantelar sus infraestructuras y retirarse al norte del río Litani. Sin embargo, ahora Katz dice que Tel Aviv no va a cumplir cn su parte: "Hezbolá debe retirarse completamente más allá de la línea (del río) Litani y el Ejército libanés debe hacerlo cumplir y desarmar su presencia bajo la supervisión del mecanismo establecido bajo el liderazgo de los EEUU". El ministro también ha afirmado que su Ejército ha reforzado su presencia de tropas en el lado israelí, a lo largo de la frontera entre los dos países, "a fin de garantizar la seguridad de las comunidades del norte".
Ante este escenario, el lunes, el Gobierno libanés volvió a indicar su compromiso con el cumplimiento íntegro de la resolución 1701, que puso fin a la guerra líbano-israelí de 2006 y sobre la que está basado el nuevo alto el fuego. En cambio, el Ejército libanés ha manifestado el despliegue de sus unidades militares en una decena de pueblos del sur del país y otras zonas fronterizas. Según un comunicado militar, "con fecha del 17 y 18 de febrero de 2025, unidades militares se desplegaron en los pueblos de Al Aabasiyeh, Al Mayidiye, Kafrkala-Marjayoun en el sector del este, Adaiseh, Markaba, Houla, Mais al Yabal, Blida, Muhabib-Marjayoun, Marun al Ras y lo que quedaba de Bint Jbeil en el sector central". También se han desplegado en otros lugares fronterizos en el área del sur del Litani con la coordinación de Naciones Unidas y el Comité Quinquenal de Supervisión del Acuerdo de Alto el Fuego.
La ruptura del acuerdo
Esta ruptura es algo que el Gobierno de Netanyahu ya había cmunicado. En enero, antes de la primera prórroga, la oficina del primer ministro israelí decía que no iba a completar su retirada antes de la fecha límite, ya que aseguraba que el Líbano no había aplicado plenamente lo acordado. A su vez, el embajador israelí en Washington, Mike Herzog, estimó que la fecha de la retirada no estaba "escrita en piedra" y que era flexible. Según Human Rights Watch, desde el alto el fuego, Israel ha matado a al menos a 57 personas en el Líbano incumpliendo la tregua.
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