Un juez federal de Texas otorgó el viernes otra contundente victoria a los opositores al aborto en Estados Unidos, al retirar la autorización para comercializar la píldora abortiva mifepristona, aprobada hace más de 2 décadas y utilizada cada año por medio millón de estadounidenses.
Con su orden nacional revoca la aprobación de la mifespristona, autorizada por la Administración de Alimentos y Fármacos (FDA) hace 23 años.
El juez fundamenta su decisión en que, al momento de la aprobación del medicamento, la FDA no consideró los posibles impactos negativos que la píldora podría tener en la salud de las personas que la tomaran.
Según el juez Matthew Kacsmaryk, la agencia "falló por completo en considerar un aspecto importante del problema al omitir cualquier evaluación de los efectos psicológicos del fármaco o una evaluación de las consecuencias médicas a largo plazo del fármaco".
Ante esta decisión, la administración del presidente Joe Biden ha asegurado que luchará para defender el derecho de acceso a la píldora.
La vicepresidenta, Kamala Harris, ha calificado la decisión judicial como un "peligroso precedente" que no está en línea con una buena política pública.
Un segundo juez federal del estado de Washington, Thomas Owen Rice, ha dicho que la FDA debe mantener los medicamentos abortivos disponibles en al menos 12 estados que demandaron a la institución fabricar las píldoras abortivas. Los estados en los que se mantendrían son Washington, Oregon, Arizona, Colorado, Connecticut, Delaware, Illinois, Nuevo México, Rhode Island, Vermont, Hawaii, Maine, Maryland y Minnesota. Además de Washington DC y Michigan.
Tras conocer la noticia, la gobernadora de Nueva York, Kathy Hochul, ha asegurado que su estado continuará ofreciendo acceso al aborto con el medicamento. "Independientemente del fallo de hoy, el acceso y la atención del aborto aún están disponibles en Nueva York. Cualquier persona que necesite atención, nuestro estado lo recibirá con los brazos abiertos", ha afirmado en un comunicado.
Si (
No(
