El Consejo Constitucional de Francia ha aprobado los puntos esenciales de la reforma de las pensiones del presidente Emmanuel Macron. Aunque los jueces han censurado algunos artículos secundarios, el Gobierno francés ya puede promulgar la impopular ley que aumentará la edad de jubilación de los 62 a los 64 años. El alto tribunal ha denegado la iniciativa para un referéndum que, de haber tenido éxito, podría haber anulado la reforma recién aprobada.
El dictamen llega tras doce jornadas de protestas sindicales y se puede considerar una victoria a medias, ya que el Constitucional ha vetado algunos artículos de la ley, lo que supondrá un debate sobre si es mejor aprobarla con parches o si debería empezar de nuevo. El tribunal tiene de plazo un mes para examinar otro recurso para la celebración de un referéndum. De aprobarse se abriría la puerta a los opositores de la reforma.
En la calle continúan las protestas y el rechazo social a la medida, aunque la última, celebrada este jueves, tuvo menos manifestantes que en otras ocasiones, aunque también fue multitudinaria. Los sindicatos ya habían advertido que aunque el Consejo avalase la reforma, continuarían con las protestas.
Los sindicatos siguen oponiéndose
Los dos principales líderes sindicales del país, Laurent Berger (CFDT) y Sophie Binet (CGT), habían advertido de que las protestas no acabarían con la decisión del Consejo Constitucional, que ya temían favorable al Gobierno.
"Esta ley está empañada por una serie de fallos jurídicos, democráticos y sociales", ha declarado Binet este mismo viernes.
El ánimo en los sindicatos franceses es de "combatividad y determinación", ha afirmado Binet. Así que lo más probable es que, tras esta decisión del Constitucional, las centrales hagan un llamamiento unitario "a nuevas acciones".
Por otra parte, la primera ministra, Élisabeth Borne, se ha mostrado conciliadora y ha asegurado que su intención es "apaciguar" los ánimos.
"Soy consciente del rechazo a la reforma de una parte de la población francesa. Es importante que podamos tener en cuenta todas las preocupaciones, que se pueda debatir con las organizaciones patronales y sindicales", ha señalado Borne.
Macron quiere reunirse con los sindicatos
Macron ha pedido una reunión con los sindicatos franceses el próximo martes. El Jefe del Estado ha invitado al diálogo "sin condiciones previas" e "independientemente de la decisión del Consejo Constitucional".
El líder francés ya había dejado clara su predisposición a reunirse con los sindicatos, pero solo después de conocerse el dictamen constitucional que hemos conocido este viernes.
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