Evidentemente, el PP y Rajoy harán todo lo que tengan en sus manos para convencer al PSOE de una abstención parcial a última hora para permitir la investidura y la formación de gobierno, evitando así las terceras elecciones. Pese a que ya está decartada la entrada de lo socialistas al Ejecutivo en forma de gran coalición, con vicepresidencia y algunos ministros del PSOE, Rajoy baraja otra serie de ofertas para seducir a Pedro Sánchez.
Además de que Rajoy prosiga con sus negociaciones con otros grupos, como los canarios de CC o los vascos de PNV, habrá otros movimientos paralelos. Por ejemplo, según 'el País', utilizará las exigencias de Bruselas para presionar al PSOE y sumarle al proyecto de investidura, además de pactar, con límites, la reforma de la Constitución que tanto se proclama desde la oposición con el eslogan del 'cambio'.
El presidente en funciones sí que se someterá esta vez a la sesión de investidura proponiéndose al monarca, no como tras las elecciones de diciembre, e intentará gobernar en minoría asumiendo que deberá hacer cesiones a todos los grupos.
El diario 'El Mundo' destaca que Rajoy "contempla ya un Gobierno en minoría a principios de agosto". En parecidos términos, 'El Periódico' apunta que Rajoy "aspira a ser investido por la mínima antes de agosto". Para 'ABC', Rajoy "confirma a CC que irá a la investidura sin gran coalición". 'La Vanguardia' señala que el jefe del Ejecutivo "piensa ya en las cesiones para conseguir la abstención del PSOE", mientras que 'Cinco Días' destaca que "baraja hacer cesiones para ir a la investidura la última semana de julio".
Rajoy recibirá hoy en La Moncloa al portavoz del PNV, Aitor Esteban, y a los representantes de ERC Joan Tardá y Gabriel Rufián, en este caso por pura cordialidad parlamentaria, ya que nadie cuenta con un acuerdo. El presidente del PNV, Andoni Ortuzar, negó que su partido ponga "líneas rojas" para apoyar la investidura de Rajoy, como el acercamiento de presos etarras al País Vasco, aunque reconoció que ese punto forma parte de la 'agenda vasca' y que, llegado el momento, no la esconderán de la negociación. El portavoz de ERC en el Congreso, Joan Tardá, valoró la llamada de Rajoy porque, si bien mantienen posiciones antagónicas", "siempre es bueno" que se pueda dialogar.
Respecto a las reclamaciones del PNV sobre los presos de ETA para la formación de gobierno, el vicesecretario de Organización del PP, Fernando Martínez Maillo, dijo que los populares no defraudarán a sus "planteamientos históricos en la lucha contra el terrorismo". El número dos de Ciudadanos, José Manuel Villegas, dijo que las reclamaciones del PNV son "incompatibles" con un acuerdo con su partido.
El PSOE prepara su 'no'
Mientras tanto, los escaños clave para lograr la investidura, los del PSOE, ya sean por voto positivo o abstención, están cada vez más lejos. El Comité Federal del PSOE aprobará el sábado dar un no rotundo a la investidura de Rajoy como presidente del Gobierno. El portavoz del PSOE en el Senado, Óscar López, dijo que su partido tiene ya "decidida" su posición "clara" de votar en contra de la investidura de Rajoy.
En parecidos términos se manifestaron las secretarias generales del PSE-EE y del PSOE-M, Idoia Mendia y Sara Hernández, respectivamente, tras la reunión que mantuvieron con el líder socialista, Pedro Sánchez. "Somos la alternativa al PP y no podemos favorecer ni facilitar un gobierno de ese partido, por lo que el voto del PSOE será no a la investidura de Rajoy", dijo Mendia, que no descartó la convocatoria de otro Comité Federal. Los diarios interpretan sus palabras como la posibilidad de que el PSOE podría cambiar de posición de cara a la investidura en un nuevo Comité, si bien Mendia lo descartó en declaraciones a EL PAÍS. Por su parte, Hernández insistió en que la gobernabilidad "pasa única y exclusivamente por el PP".
Mientras, el presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, defendió el no de su partido, aunque insistió en que "nadie sabe qué puede ocurrir si se produce en España un bloqueo institucional". En su opinión, el PP tiene que buscar los apoyos de Ciudadanos, CDC, Coalición Canaria y PNV, con quienes "se ha entendido en el pasado". Para el presidente aragonés, Javier Lambán, los ciudadanos han puesto a los socialistas en la oposición, porque tienen que "empezar a ejercerla votando no a la investidura de Rajoy".
Desde otra perspectiva fruto de la veteranía, el ex ministro y asesor del equipo de expertos de Sánchez, Josep Borrell, dijo ayer que si Rajoy no logra conseguir una mayoría que le permita gobernar el PSOE "tendrá que saber qué es lo que tiene que hacer" y sabiendo que "alguien tendrá que abstenerse". Por su parte, el ex presidente Zapatero aseguró que el PSOE mantendrá una "posición coherente" con sus electores y consideró necesario esperar a las propuestas e ideas que surjan del Comité Federal.
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