Rubalcaba no concreta si disolverá por la fuerza a los manifestantes de Sol

En realidad, el Gobierno, que ha debatido este asunto en la reunión del Consejo de Ministros, ha decidido esperar acontecimientos. La tesis del vicepresidente primero y ministro del Interior, Alfredo Pérez Rubalcaba, que ha suspendido sus dos actos previstos de campaña electoral, es que la Policía no está para crear problemas y que, por lo tanto, su actuación debe estar condicionada a tres principios: "Oportunidad, congruencia y proporcionalidad". Pero, ¿hará cumplir la Policía, aunque sea por la fuerza, la resolución de la Junta Electoral Central y disolverá a los manifestantes, especialmente los de la madrileña Puerta del Sol, el día de reflexión? Rubalcaba se ha negado a responder y se ha limitado a decir que "habrá que esperar" y que "la Policía actuará en función de los acontecimientos". Lo que sí ha reconocido el ministro es que sobre su mesa se encuentran tres leyes: la de seguridad ciudadana, la de reunión y manifestación y la Orgánica del Régimen Electoral General (LOREG) y que cualquier respuesta que se adopte desde el Ministerio del Interior será la adecuada en relación a esas tres leyes, además, claro está, de la propia resolución de la Junta Electoral Central (JEC), que ha prohibido las concentraciones. ¿Habrá disolución de los concentrados? Rubalcaba no contesta, sólo dice que hay que tener en cuenta que hasta ahora las concentraciones "se han desarrollado de manera absolutamente pacífica: no ha habido ningún incidente", para repetir hasta por tres veces que "la Policía sabe hacer perfectamente su trabajo", y para insistir hasta en otras ocasiones que "no le quepa duda de que la Policía y la Guardia Civil van a cumplir con la ley: hoy, mañana y pasado". Pero, ¿cómo cumplirán con la ley? ¿Con el uso de la fuerza, dado que los concentrados no tienen intención de disolverse? El ministro se niega a responder a esa pregunta, pero la sensación reinante es que Rubalcaba ordenará actuar a los antidisturbios en función de los incidentes que se registren, pero sobre en función del número de personas que se concentren. Lo que Interior quiere evitar sobre todas las cosas es una batalla campal que dé argumentos de 'martirología' a los convocantes de la protesta. Por otro lado, el ministro ha confirmado que desde la mañana de este viernes se ha colocado al frente del dispositivo. Ya ha mantenido varias reuniones con sus asesores y mandos y ha hablado de coordinación con los consejeros de Interior del Gobierno vasco y de la Generalitat de Cataluña, regiones en las que tienen competencia las policías autonómicas. RESOLUCIÓN DE LA JUNTA ELECTORAL CENTRAL