Ex agentes de Nueva York demandan a la productora de "American Gangster"

Un grupo de agentes neoyorquinos ya retirados de la Agencia Antidrogas de Estados Unidos (DEA) demandó este miércoles a NBC Universal al considerar que la película 'American Gangster', protagonizada por Denzel Washington, degrada la imagen de ese colectivo.

La película cuenta la historia de Frank Lucas, un traficante de drogas del barrio neoyorquino de Harlem, que se convirtió en colaborador del Gobierno en 1975 y cuyas filtraciones llevaron al enjuiciamiento de varios camaradas mafiosos.

La demanda, presentada este miércoles ante una corte de Manhattan y por la que se pide una compensación de un mínimo de 50 millones de dólares, asegura que la película denigra a cientos de agentes de la DEA y a los oficiales de Policía de la ciudad de Nueva York.

En ese sentido, los demandantes lamentan que en la película se de a entender que la colaboración de Frank Lucas, personaje que encarna Denzel Washington en la película, con las autoridades llevó a la condena de miembros de la DEA en Nueva York.

Según el texto de la demanda, ningún agente de ese departamento o de la Policía de Nueva York fue condenado a raíz de las informaciones facilitadas por Lucas.

"Se trata de algo completamente irregular. No se en qué estaban pensando estos tipos, pero lo que han hecho lo van a pagar", aseguró al presentar la demanda uno de los abogados que se enfrentó a Lucas en el proceso de 1975 y que ahora representa a los agentes retirados.

A través de un comunicado, Universal Pictures aseguró que la demanda "carece de crédito por completo" y añade que la película, dirigida por Ridley Scott, "no difama sobre ellos o sobre ningún otro agente federal".

Además, asegura que los agentes a los que se hace referencia en la película son policías y no miembros del departamento antidroga.

Los tres demandantes han presentado una demanda colectiva en la que representa a otros cuatrocientos agentes que trabajaban en la ciudad entre 1973 y 1985 y reclaman en conjunto al menos 50 millones de dólares en concepto de compensación punitiva.

En la película, estrenada el pasado noviembre y en la que también trabajan Russell Crowe y Josh Brolin, agentes corruptos de narcóticos disparan al perro del traficante, atacan a su mujer y roban dinero de su casa en el momento del arresto de Lucas, irregularidades que niegan los demandantes.

Candidata a tres Globos de Oro en la reciente edición, de los que no ganó ninguno, la película cuenta la historia de Frank Lucas, un silencioso chofer del jefe de la mafia negra neoyorquina que, cuando este muere, se hace con el tráfico de drogas de la ciudad, controlada por el policía Richie Roberts (Crowe).

Lucas, que utilizaba los féretros de soldados estadounidenses traídos de Vietnam para distribuir heroína por Nueva York, se enriqueció ostensiblemente en la década de los 60 gracias a ese sistema, hasta que las autoridades consiguieron echarle el guante.