Este verano de 2023 va a ser de muchas despedidas en el Real Madrid y eso hará que la afición afronte momentos de algunas lágrimas.
La temporada no ha sido decepcionante del todo, pero se han escapado los 2 grandes títulos: Champions League y Liga española, sobre todo cuando la primera parecía factible hasta el duelo ante el Manchester City.
Pero las razones de esas lágrimas, como decíamos, será por los jugadores que durante años han estado defendiendo los colores blancos del equipo y que acaban contrato.
Los futbolistas que el 30 de junio quedan libres son:
Cada uno de ellos tiene situaciones muy diferentes. Mariano estaba sentenciado desde hace más de 2 temporadas, tras llegar en 2018 como recambio de última hora de Cristiano Ronaldo, fruto de la improvisación y la falta de trabajo en el mercado durante todo ese verano. Fichó cuando no se encontró alternativa y el Sevilla amagó con ficharlo. El Madrid ejecutó la opción de recompra pero nunca cumplió expectativas tras una buena temporada en el Lyon.
Lo de Benzema ya está comentado: se daba más que por hecha su continuidad al menos otro año más, pero a última hora una millonaria oferta del fútbol saudí le ha hecho pensárselo. Le ofrecen, al parecer, 200 millones de euros por 2 años de estancia, y sabedor de que su rendimiento ha bajado, duda de si podrá seguir al mismo nivel que en las pasadas temporadas en el Madrid. El club respetará su decisión, y fichará urgentemente en caso de que confirme su adiós este mismo domingo, cuando acabe el último partido de Liga. El rumor es que así será, y el Madrid piensa en Harry Kane y el ex canterano Joselu como refuerzos de máxima prioridad.
El delantero balear, Asensio, en cambio, tiene ya decidido marcharse y ha rechazado una modesta oferta de renovación del club. Sabe que continuar con Ancelotti le supone ser suplente de Rodrygo y Vinicius, así que estudia ofertas en Inglaterra. La más firme es la del Aston Villa de Unai Emery, donde será la estrella indiscutible.
El caso de Nacho es más sensible. Canterano de toda la vida, no conoce qué es jugar fuera del club, pero a su edad ha reflexionado y sabe que jugará poco y mal, sobre todo porque tiene 3 centrales por delante que son prioritarios para Ancelotti: Alaba, Militao y Rüdiger. No quería irse, pero escuchará ofertas en el fútbol español para darse el gustazo de sentirse líder de una defensa de élite.
Así que si hay lágrimas este verano está claro quiénes serán los protagonistas: el canterano Nacho y los ídolos Modric y Benzema. Las marchas de Asensio, Mariano y Ceballos sreán, dejémoslo claro, más soportables para la hinchada. Kroos también despierta cariño, pero no habría una tragedia si pusiera fin a su estancia en el equipo.
Aparte de los jugadores que acaban contrato, otros van a salir ante la falta de oportunidades.
Jesús Vallejo es el eterno central de fondo de armario, pero la situación es extrema para él. Ancelotti no cuenta con él y aunque se vaya Nacho, no va a jugar. Acaba contrato en 2025 pero ambas partes buscarán un destino, seguramente con la carta de libertad.
Otro defensa en situación delicada es Álvaro Odriozola. El lateral derecho no es una opción para suplir a Carvajal y es la tercera opción en ese puesto, por detrás de Lucas Vázquez. También se le buscará salida, pero no tiene mercado, sobre todo porque el club quería ganar algo con su traspaso. Acaba contrato en 2024, así que lo más seguro es un venta a coste simbólico, pero cercana a cero.
El capitulo aparte en la plantilla blanca es Eden Hazard. Es un debate destinado a perder tiempo. No tiene mercado y ningún club quiere hacerse cargo de sus aspiraciones económicas, sobre todo porque su rendimiento ha sido nulo tras la gran lesión de 2019. Se quedará porque no hay dónde ubicarlo, aunque lógicamente está en el área de salidas si ocurre algún milagro.
Los cedidos son otro problema en este sentido para el Madrid y Ancelotti. Reinier y Brahim Díaz costaron bastante dinero en su momento como promesas pero no tienen hueco en la plantilla. El que mejor lo tiene es el español, ya que con la presumible salida de Asensio y Mariano, habrá más huecos en la delantera y alguna oportunidad. El brasileño, en cambio, que llegó en la etapa de los fichajes brasileños, junto a Vinicius y Rodrygo, no ha podido crecer lo suficiente ni en el Borussia Dortmund o el Girona, como cedido. En su defensa, las lesiones no le han permitido tener continuidad.