La conocida como 'Manada de Castelldefels' ha sido enviada a prisión incondicional, incomunicada y sin fianza tras la decisión de la titular del Juzgado de Instrucción número 5 de Gavà.
Para la magistrada los 5 acusados actuaban como un "grupo criminal" para violar a chicas en grupo. En el auto recoge que los 5 conocían a las mujeres mediante apps de citas y las engañaban para después violarlas.
Además, indica que presumían de sus 'proezas' en los chats de WhatsApp que se han analizado: "a la chavala esa la hemos destrozado, le hemos dado en el DNI", "“¿Desde cuándo una tía es solo para uno" o "un poco de contacto posterior a fin de controlar que no denuncien".
Son algunos fragmentos de las conversaciones del chat grupal en el que escribían los acusados y que han sido admitidos por la magistrada como prueba, además del relato de las víctimas.
Una narración “clara, persistente y coherente” de las víctimas
De momento hay 3 víctimas presuntamente confirmadas, aunque podría haber más que todavía no han sido identificadas.
Según informa 'La Vanguardia', la jueza instructora del caso ha dado por válido el relato de las jóvenes, una reconstrucción "“clara, persistente y coherente”, aunque el abogado defensor de los acusados ha criticado el relato de una de ellas por "contradictorio".
De las palabras de ellas se desprende que los acusados realizaban siempre el mismo modus operandi, contactar a través de apps de citas, para quedar con las chicas, emborracharlas y violarlas posteriormente en grupo.
Una de ellas destacó que accedió a mantener relaciones con uno de ellos, pero que en la habitación entraron otros 3 más y uno de ellos le obligó a practicarle una felación.
En general todas las versiones coinciden en que acudían engañadas, algunas de ellas en condiciones de vulnerabilidad por el alcohol y pese a negarse, los 5 las forzaban a mantener relaciones sexuales.
Después de las violaciones los acusados intentaban mantener el contacto por WhatsApp, unos mensajes que la defensa ha tratado de jugar a su favor, pero que la jueza ha catalogado como "estrategia" "a fin de controlar que no denuncien".
El caso se destapó gracias a la denuncia de una de ellas y después los investigadores consiguieron encontrar a las otras 2 víctimas. Temen que haya más pero que no hayan querido denunciar los hechos, pues todo indica a que llevan realizando esta práctica desde hace años.
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