Génova perfila sus defensas mientras vuelve la calma pública entre Ayuso y Casado

La pugna interna por el control del Partido Popular de Madrid continúa. La dirección nacional ya deja entrever cuál sería otro mecanismo de defensa en caso de que la tensión no cese: la designación de una nueva comisión gestora que controle el partido en Madrid.

Según ha adelantado la 'Cadena SER' y confirman fuentes cercanas, los estatutos populares permiten a la dirección nacional designar una nueva gestora para dirigir a la organización madrileña alegando que existe un riesgo de fractura interna del partido, por circunstancias como la presunta lucha de poder entre Pablo Casado e Isabel Díaz Ayuso.

Pulsar este 'botón' sería una respuesta a la petición constante de un adelanto de primarias y al cuestionamiento permanente de la validez de la actual presidencia del PP de Madrid, que encarna Pío García Escudero desde que en 2018 dimitió Cristina Cifuentes de todos sus cargos.

De esta forma, Génova podría instaurar un nuevo régimen de interinidad con tal de retrasar la elección de la nueva presidencia del partido en Madrid, dilatando unos tiempos que Díaz Ayuso quiere acortar al máximo posible por una cuestión de "estar lo mejor preparados posibles ante las elecciones de 2023" y "contagiar a toda la región de la ilusión del cuatro de mayo", según la propia dirigente regional que, a la vez, "acatará" lo que diga el partido mientras reina el silencio y la calma pública entre los populares madrileños desde hace unos días.

Según viene establecido en el artículo 36 de los estatutos del Partido Popular, los Comités Ejecutivos regionales podrán "nombrar Comisiones que gobiernen transitoriamente algunas de las organizaciones territoriales dependientes de ellas, siempre que se aprecien graves circunstancias que así lo aconsejen". Asímismo, establece este artículo una limitación temporal de seis meses para ese "gobierno transitorio de la organización temporal", ya que, una vez transcurrido ese tiempo, deben convocarse elecciones en los dos meses siguientes. En este punto entra en juego el tipo de criterio que se puede aplicar por parte de la dirección nacional para establecer qué es una "grave circunstancia", algo que tendrá que explicar Génova en caso de recurrir a este procedimiento estatutario.

La fórmula de primarias

Las primarias del Partido Popular es uno de los elementos que más preocupan en la formación, a nivel regional y nacional. Según fuentes cercanas, la formación madrileña está plantenado solicitar que en la segunda vuelta de las elecciones internas se aplique la fórmula de "un militante, un voto", algo que solo se ha practicado en una ocasión, cuando Cristina Cifuentes llegó a la presidencia del PP en la región en 2017.

Según los estatutos, las primarias tienen dos escenarios previstos. Para que un candidato gane en la primera vuelta debe obtener más del 50 por ciento de los votos de los militantes y sacar 15 puntos de ventaja al segundo candidato, si lo hubiera. En caso de que ninguno consiga estos mínimos resultados se produciría la segunda vuelta, en la que ya no serían los militantes los que votaran sino los compromisarios del partido en la región, escenario en el que la Dirección Nacional se presupone con una mayor maniobrabilidad por su influencia en la estructura orgánica.

En este punto, fuentes de la organización regional aseguran que están planteando pedir que en esta segunda vuelta también puedan votar los militantes junto con los compromisarios. Esta fórmula está contemplada en los estatutos nacionales y ya se aplicó con Cristina Cifuentes cuando en segunda vuelta muchos militantes se "convirtieron" en compromisarios.

La fórmula de las primarias supone un elemento que los populares tienen muy en cuenta, en caso de que alguien además de Díaz Ayuso dé el paso, alguien como José Luis Martínez Almeida, sobre el que se ha especulado en cuanto a su posible candidatura, dirigida por Génova, para competir contra ella, algo que niegan por ahora desde el Palacio de Cibeles. Hay que recordar que en segunda vuelta ganó Pablo Casado las primarias en 2018, después de sacar menos votos en primera vuelta contra Soraya Sáenz de Santamaría.