El aeropuerto de ‘Barcelona-El Prat’ llevará a partir de ahora el nombre del que fuera president de la Generalitat en el exilio Josep Tarradellas, tal y como ha acordado el Consejo de Ministros. Una decisión de reconocimiento al político catalán que no ha logrado la acogida esperada. El independentismo considera que es una muestra más de las imposiciones del gobierno central.
“La queja por el aeropuerto no era por el nombre. Era y es por la gestión. Les demandas la gestión y te imponen un cambio de nombre. Les demandas decidir y te imponen el 155”, tuiteó el ex president de la Generalitat, Carles Puigdemont, tras conocerse que el Consejo de Ministros ha decidido cambiar el nombre del aeropuerto ‘Barcelona-El Prat’ para incluir el nombre del ex president Josep Tarradellas. "Queda claro qué concepto tienen de Cataluña", añadió Puigdemont.
No ha sido el único en criticar la medida. Fuentes del Govern citadas por ‘El Periódico’ critican que la decisión fue tomada de forma unilateral por parte de Moncloa y que desoyeron sus consejos de remitir a una comisión de expertos la decisión sobre el nombre. Asimismo insisten en que no había ningún problema con la denominación de ‘Barcelona-El Prat’ y que sus reivindicaciones iban asociadas únicamente a la gestión de un aeropuerto que superará los 50 millones de pasajeros al cierre del año.
Otros usuarios de las redes sociales dejaron patente una postura similar. “Y ¿por qué no poner Miguel de Cervantes Airport, por ejemplo y transferir el control a la ciudad y a la 'región', como lo haría en cualquier país civilizado? PSOE hace años que se confunde pensando que la salida para el conflicto es "lo que necesitas es amor".
E incluso había quien insinuaba que el cambio de nombre respondía a un plan de publicidad oculto de los socialistas. “TARRADELLAS es anagrama de TRASLLADARÉ y JOSEP es un gancho (J) + el PSOE. ¿Piensan que nos chupamos el dedo?”, respondía otro usuario.
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