600 comensales, 90 periodistas y más coches de gama alta (Mercedes, Audis, BMWs) por metro cuadrado que en Wall Street. Desde luego, el vicepresidente económico del Gobierno, Pedro Solbes, ha tenido un auditorio absolutamente expectante en un almuerzo informativo en un hotel de Madrid.
No es que Solbes haya revelado grandes secretos o razones de Estado en ese almuerzo, ni siquiera la fecha en la que se reunirá con su oponente Cristóbal Montoro para buscar lo que parece un ‘pacto imposible’ con el PP, pero, desde luego, estuvo muy bien arropado por las ministras Garmendia, Aído y Corredor y por el ministro Sebastián.
Y, desde luego, por lo más de lo más del mundo económico y empresarial: desde Florentino Pérez hasta Juan Miguel Villar Mir, pasando por Braulio Medel, Juan Ramón Quintás, Miguel Blesa, Alfredo Sáenz… y un largo etcétera.
Pero, en fin, ni en el turno de preguntas empresarios y periodistas han conseguido sacarle gran cosa al vicepresidente económico. Lo máximo que Solbes ha destacado es que es contrario a aumentar la cantidad garantizada en España por el Fondo de Garantía de Depósitos en caso de quiebra bancaria, a cambio de renunciar a aportar a dicho Fondo a priori, que es el sistema español, frente al modelo de otros países, en los que las aportaciones se hacen una vez que aparecen los problemas, como pueden leer en Diariocrítico.
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