El Real Decreto 1963/2008 establece un sistema de votación basado en procedimientos electrónicos, si bien con la excepción del voto por correspondencia, y que ha sido el que ha caracterizado las convocatorias electorales al citado Consejo Asesor de Personal. Este procedimiento “presenta numerosas ventajas”, según el Decreto aprobado por el Gobierno socialista el pasado 28 de noviembre,
“entre las que destacan la posibilidad de que los electores puedan ejercer su derecho al voto en cualquier punto de votación y la mayor celeridad y simplificación del escrutinio. No obstante se determina la obligación de que en la convocatoria de elecciones se establezca la forma de solucionar las incidencias que puedan darse en la votación, siempre que las mismas respondan a causas no imputables al elector”.
Para poder ejercer el derecho a voto, los guardias civiles tendrán que desplazarse a sus respectivas Comandancias. Allí deberán introducir su tarjeta personal en el ordenador con el programa ya instalado y teclear su número personal. Acto seguido se abre la opción de votación según la escala a la que pertenezca –básica, suboficiales, oficiales y oficiales superiores-. En ese menú –cada uno en su escala- se despliegan las opciones; es decir, aparecen las candidaturas de las asociaciones que se presenten a la elección. En ese momento se podrá votar por la candidatura deseada.
Ahora bien, en el sistema queda registrada la personalidad de quien está ejerciendo el derecho al voto y, lógicamente, el sistema registra también la candidatura que se vota. Así se impide que una misma persona pueda votar dos o más veces, pero el sistema puede acabar con la confidencialidad. Es decir, que teóricamente se puede conocer quién ha votado a qué candidatura.
Según fuentes asociativas, la dirección de la Benemérita les ha dado ‘seguridades’ de que nadie tendrá acceso a los datos que se generen. Incluso les han explicado que el programa no permitirá esa asociación de persona-voto, pero ¿quién controla a los ‘controladores’? Y aún igual de importante: ¿Por qué se empecina el Ministerio del Interior en que no haya papeletas, que es el sistema tradicional, sino voto electrónico, además del de por correo?
No habrá liberados
Pero no es ésa la única ni más importante queja. Para empezar, las asociaciones que se presenten a estas elecciones para el Consejo de la Guardia Civil dispondrán de sólo tres días para preparar la campaña electoral. A este respecto, los sindicatos de la Policía disponen de 15 días para las elecciones a su Consejo.
Igualmente, los policías pueden tener hasta once ‘liberados’ –libres de servicio para poder ejercer tareas sindicales, pero percibiendo su sueldo por Interior- por cada consejero obtenido para el Consejo de la Policía, mientras que la Guardia Civil no contará con ningún ‘liberado’. “Nos dejaron muy claro que no somos sindicatos, sino asociaciones”, explica un mando asociativo. Así, pues, no estarán ‘liberados’ ni los consejeros elegidos para el Consejo de la Guardia Civil, los cuales dispondrán de sólo tres días libres para cada ocasión en la que sean convocados al Consejo.
Y, en fin, tampoco se han negociado las subvenciones que percibirán las asociaciones que obtengan representación en el citado Consejo. Punto importante éste, dada la penuria asociativa en la Guardia Civil.
En estas elecciones se tienen que elegir un total de 15 consejeros: 11 por la escala básica, 2 de suboficiales, uno de oficiales superiores y otro de oficiales.
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