La kale-borroka ataca ahora al PNV con pintura a varias sedes

Grupos de radicales vascos atacaron esta madrugada del sábado con pintura roja y amarilla los batzokis de los barrios bilbainos de Santuxu y San Ignacio "Sabindarrak", el de Barakaldo "Gurutzeta" y los de Durango y Alonsotegi, según informaron fuentes del PNV.

Los responsables de estas cinco sedes sociales del PNV vizcaínas encontraron las pintadas al abrir esta mañana los locales. Aparte de las manchas de pinturas roja y amarilla, los autores habían realizado pintadas con el texto "PNV español" y "Azkuna y Azkarate mentirosos".

Mientras, la Policía investiga las cartas de extorsión que, al parecer, ETA ha enviado  a  empresarios, según la vicepresidenta De la Vega, que no quiso contestar a Otegi, quien en una comparecencia de prensa celebrada en Bilbao, en la que no se admitieron preguntas, leyó un comunicado de 10 puntos, en el que se afirma que "el único acuerdo capaz de garantizar" ese escenario "pasa por la construcción de un marco democrático que reconozca la territorialidad y el derecho de autodeterminación". A su juicio, de esta forma, "las soluciones de hoy tienen que posibilitar que todos los proyectos puedan materializarse mañana".

  En la rueda de prensa tras el Consejo de Ministros, la vicepresidenta primera del Gobierno, María Teresa Fernández de la Vega, reconoció que la Policía está investigando las nuevas cartas de extorsión a empresarios vascos por parte de ETA, recibidad, al parecer, durante el mes de octubre, pero se negó en redondo a comentar el comunicado de Batasuna: “Ni respondo ni comento, nunca”, dijo, para añadir su retahíla de que "el contexto es la Ley y la Constitución. Nada fuera de la ley” y que “para avanzar es imprescindible la ausencia total de la violencia. El Gobierno no admite chantaje alguno”.

Territorialidad y autodeterminación

  El representante de Batasuna aseguró que la izquierda abertzale quiere reiterar "su firme compromiso en la búsqueda de una aproximación suficiente para la puesta en marcha de un diálogo multilateral, primero, y de un acuerdo final", después, "que garantice la definitiva superación del conflicto en Euskal Herria".

   Tras insistir en que el proceso pasa por una fase de "crisis y bloqueo", señaló que "la persistencia de la estrategia de acoso judicial y policial contra la izquierda abertzale es uno de los obstáculos mayores en estos momentos", así como "la falta de compromiso claro por parte de algunos agentes políticos" para establecer un calendario, agenda y método de la mesa de partidos.

   Además, recordó que el 18 de agosto ya advirtieron de "la existencia de múltiples obstáculos que impedían la puesta en marcha de un diálogo político multilateral en Euskal Herria para la resolución del conflicto" y aseguró que esta situación todavía se mantiene.

   En este sentido, indicó que "la persistencia de una estrategia de acoso judicial y policial contra la izquierda abertzale" es, desde su punto de vista, "uno de los obstáculos mayores" a los que se enfrenta el proceso porque "no permite a una de las partes desarrollar su actividad política en igualdad de condiciones".

   Para el dirigente abertzale, "la igualdad de condiciones es una de las premisas que se hacen imprescindibles para la puesta en marcha de un diálogo político constructivo". "Detrás de esa estrategia represiva se esconde el objetivo de condicionar y desnaturalizar los contenidos del proceso de negociación política tendente a la resolución del conflicto", aseveró.

   Tambié lamentó "la falta de compromiso" de algunos partidos políticos vascos para lograr "un nivel de aproximación suficiente en torno al método, calendario y agenda política para el diálogo multilateral". En su opinión, esto "completa un cuadro realmente preocupante de una situación que es descrita por parte de la izquierda abertzale como de 'crisis y bloqueo'". 

   Arnaldo Otegi subrayó que "durante este mismo periodo, han sido muchos y variados los intentos por parte del Gobierno español y algunos agentes políticos vascos por negar esta crisis, intentando trasladar a la opinión pública la falsa idea de que el proceso se desarrollaba según los parámetros previstos".

   "Negar los problemas, negar la crisis era y es la peor receta para poder salir de la misma. Quien niega los problemas, niega también su posible solución. Reconocer la existencia de la crisis, buscar sus causas y darles una solución acordada es la única receta válida para acabar con la inestabilidad permanente, en la que la falta de ambición histórica y de voluntad política han conducido al proceso", destacó.

   La metodología abertzale

   Por ello, dijo que una solución "compartida" pasa por alcanzar "una aproximación suficiente en torno a la metodología y agenda política, así comop por garantizar condiciones de igualdad para todas las partes que participan en el proceso". A su entender, esa "aproximación es la única garantía de estabilidad y seguridad para el proceso de diálogo político".

   Sobre la agenda política, señaló que debe recoger "los dos grandes núcleos de debate" como son "la vertebración territorial y el derecho a decidir libre y democráticamente nuestro futuro político e institucional", tanto en la vertiente interna (modelo de relación entre los territorios vascos) como en la externa (modelo de relación con los Estados español o francés).

   "Las viejas recetas y los viejos estatus políticos han demostrado suficientemente su incapacidad para resolver dichos debates pendientes. No se puede construir, pues, un futuro político acordado para nuestro pueblo desde las recetas y los estatus del pasado", reiteró Otegi en su largo monólogo.

   Otegi dijo también que "sólo desde fórmulas acordadas que den satisfacción democrática y suficiente a dichas cuestiones, que como viene quedando patente, son demandadas por la mayoría de la sociedad vasca, será posible ese escenario de paz justa, estable y duradera para Euskal Herria". "Hacer posible ese escenario y no otro es el objetivo del proceso de diálogo multilateral", afirmó.

   En esta línea, dijo que, "desde la defensa de un proyecto de independencia y socialismo para Euskal Herria, que debe disponer de las mismas posibilidades de materialización que el resto de proyectos políticos, la izquierda abertzale considera que el único acuerdo capaz de garantizar dicho escenario pasa por la construcción de un marco democrático que reconozca la territorialidad y el derecho de autodeterminación para Euskal Herria".