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Elena González Moñux, concejala presidenta de Fuencarral-El Pardo

"Los vecinos de Mirasierra tienen miedo de quedarse sin metro"

lunes 22 de diciembre de 2008, 14:10h
Fuencarral-El Pardo enfrenta el 2009 con un presupuesto al que no parece afectarle la crisis. 37,12 millones de euros así lo confirman. Madridiario entrevistó a su concejala presidenta, Elena González Moñux (Madrid, 1962), para conocer más a fondo los proyectos del distrito. Además, la concejala aprovechó para explicar la situación que están viviendo los vecinos en torno al polémico derribo del IES Mirasierra.
A punto de finalizar el 2008, ¿podría hacer un balance de cuáles han sido los proyectos que más destacaría de los llevados a cabo en Fuencarral-El Pardo?
Al ser un distrito muy grande y tener un presupuesto bastante alto para el año 2008 hemos podido llevar a cabo actuaciones de importancia, que continuarán en 2009, sobre todo en colegios como rehabilitaciones en el Jorge Guillén, que habían sido muy demandadas. En materia de mantenimiento y obras en general en polideportivos contamos aproximadamente con 1.800.000 euros para este año más las obras de inversión.

Además, en el ámbito de la cultura estamos haciendo cosas buenas e interesantes para el distrito. Por ejemplo, celebramos el I Certamen de Pintura Rápida de El Pardo, consiguiendo un número importante de participantes con muy buenas obras y muy buen jurado. También se ha organizado un campeonato de ajedrez, ciclos de jazz… en fin, yo creo que estamos dinamizando bastante este tipo de actividades. En el Centro Cultural de La Vaguada, que ha sido recientemente mejorado, hemos conseguido traer el Premio BMW de cultura que es uno de los más importantes.

Y de cara a 2009, ¿cuáles son los principales retos del distrito?
Seguir con las obras de los colegios porque yo creo que la apuesta por la educación y los mayores es importantísima. Se acaba de inaugurar el centro de día y de mayores Fermín Caballero que está funcionando muy bien. También el Centro de Juventud de Hontalbilla, que se echó a andar en el 2008 pero que seguiremos impulsándolo en el 2009. No hay que olvidar que pese a la crisis que estamos viviendo, que se deja notar muy especialmente en los ayuntamientos, el distrito de Fuencarral-El Pardo tienen un presupuesto para este año de casi 38 millones de euros. Subimos muchísimo en juventud, por ejemplo. Aunque este año hemos hecho bastantes cosas, todavía quedan cosas por hacer.

También iniciamos las obras de la Escuela Infantil de Vereda de Ganapanes y del centro de Servicios Sociales. Este último es muy importante porque completa los servicios que ahora mismo ya funcionan en la calle de Badalona. El presupuesto de 2009 incluye además una cantidad destinada a un nuevo equipamiento deportivo en Las Tablas, aparte por supuesto de todos los acuerdos que se han firmado con la FRAVM en esta zona, que muchos de ellos se inician en 2009 y otros se irán completando en 2010.

Por otro lado, me gustaría –que además es un punto de nuestro programa electoral- poder llevar a cabo la remodelación de Herrera Oria. De todas maneras, yo creo que esta va a ser la legislatura de los equipamientos y de las actuaciones dirigidas al vecino y al ciudadano.

La mayor parte del presupuesto (más de 9 millones de euros) está destinada a la atención a las personas mayores del distrito ¿a qué tipo de actividades se destina ese dinero?
Es un distrito con una población de mayores muy elevada y el presupuesto a los mayores cubre básicamente el servicio de teleasistencia y el  servicio de ayuda a domicilio. En este sentido, si hacemos una comparativa desde el año 2003 hasta ahora, podemos decir que el incremento en esta área va siendo mayor cada año. Además, para poder tener derecho al servicio de teleasistencia las condiciones puestas por el Ayuntamiento de Madrid son muy generosas.

Últimamente se está hablando mucho del polémico derribo del Instituto de Educación Secundaria  Mirasierra para llevar el metro a ese barrio, ¿Cuál es su postura sobre este tema?
En el programa electoral del Partido Popular con el que nos presentamos a las elecciones y ganamos con una amplia mayoría, una de las propuestas era la ampliación de la línea 9 de Metro hasta Mirasierra. Por parte de Mintra se realizaron estudios para ver cuál era el mejor camino que había que seguir. Así, se vio que lo mejor era derribar momentáneamente una parte, no la totalidad, del Instituto Mirasierra que afecta a 450 niños. En el tiempo que se hace ese edificio nuevo y se concluye la ampliación de Metro se construirá otro colegio en Montecarmelo.

Al final, el resultado será un colegio público y nuevo en Montecarmelo de educación Primaria e incluso se estaría pensando por parte de la Comunidad, llegar hasta la educación Secundaria; el edificio del Instituto totalmente renovado –que es una demanda que los padres llevan tiempo solicitando porque es verdad que no está muy modernizado- y dos nuevas estaciones de metro: una para la colonia de Mirasierra y otra en Montecarmelo.

Me gustaría decir además que ha habido reuniones periódicas y constantes del Ayuntamiento y de la Comunidad en las que he estado presente, tanto con los profesores como con la directora del centro y el AMPA. Desde luego, no se ha hecho nada sin que lo supieran. Y luego está el tema de que los vecinos de Mirasierra quieren el metro. De hecho con anterioridad se habían recogido muchísimas firmas que habían sido entregadas en la Comunidad de Madrid. Los vecinos tienen miedo de quedarse sin metro por algo que se está utilizando quizá de una forma un poco interesada por parte de algunas personas.

¿Se va a facilitar el transporte hasta el nuevo colegio?

Si, así se ha comprometido la Comunidad de Madrid. Se va a facilitar la llegada al colegio a través de autocares, no va a ver ningún problema en los traslados. El tema que plantean los padres es que hay otra solución que tiene un coste económico superior en 50 millones de euros. Es mucho dinero y podrían dejar de hacerse hospitales, escuelas infantiles… y luego ¿cómo se explica eso al ciudadano? También hay que decir que las dos asociaciones mayoritarias de Mirasierra están a favor del proyecto. Yo creo que es una actuación que beneficia a todos los ciudadanos de Madrid.

Al lado del instituto hay otro centro, el Colegio Público Mirasierra, cuyos padres están preocupados por los niveles de ruido que tendrán que soportar sus hijos mientras duren las obras ¿Cómo se solucionará este problema?
Se van a instalar unas pantallas acústicas que aislaran del ruido. En Madrid ya hemos hecho unos cuánto kilómetros de metro, tanto con el señor Gallardón como con doña Esperanza Aguirre y yo creo que ya tenemos bastante experiencia. Al final es que sólo es el traslado de unos niños. Está claro que pueden generarse dudas de cómo se va a realizar, pero muchas veces cuándo hacemos rehabilitaciones en colegios al principio hay protestas pero una vez que tienes a los niños organizados, al final es como cuando haces una obra en tu casa. Todo está muy organizado y muy medido para que los niños no sufran ningún retraso y luego los padres se alegraran al ver que el edificio está nuevo y ha quedado perfecto.

Fuencarral-El Pardo es el distrito más grande de Madrid. Tiene muchos barrios y todos ellos muy diferentes entre sí. ¿Cómo se gestiona un distrito tan diverso?
Es verdad que es muy heterogéneo y hay barrios muy distintos. Pero bueno, en esta Junta hay un equipo que hace muy bien su trabajo y luego estamos lo demás, los que marcamos las directrices políticas atendiendo a las demandas y sugerencias de los vecinos. Intentamos llegar sabiendo además que las demandas no son las mismas en Mirasierra que las del Barrio del Pilar o en Begoña, donde aún quedan asentamientos, o El Pardo que parece que sigue siendo un pueblo. Pero bueno, es muy bonito y seguiremos trabajando.

¿Cuál es su deseo personal para el año que viene en el distrito?

Yo siempre he puesto mucho empeño en mayores y niños, así que intentar atender las demandas de estos sectores y cumplir nuestro programa electoral. Además, me gustaría que los plenos fueran menos tensos, porque creo que al final eso no favorece nada a la ‘democracia participativa’ que tanto llena la boca a muchos. Creo que en los plenos tenemos que decir cada uno lo que piensa pero con respeto, sin insultos. En mi carta a los Reyes Magos voy a pedir unos plenos más tranquilos.
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