La artista de 25 años, a menudo protagonista de escándalos, le tiró en la cabeza una bebida a otra turista. Ésta amenazó con la policía, pero tras la intervención del dueño del hotel, Winehouse al final se disculpó.
"Amy entendió mal una conversación y creyó por error que la estaban ofendiendo. Pero la cuestión se aclaró", afirmó el portavoz de la artista al diario.