Iglesias pidió que el Gobierno municipal desmonte estos chirimbolos porque “son armatostes antiestéticos, anuncian bebidas y productos no saludables y convierten en escaparates publicitarios a polideportivos que deben dedicarse exclusivamente a la práctica deportiva”.
En particular, el concejal socialista considera inexplicable que el Ayuntamiento haya autorizado la instalación en el recientemente inaugurado aparcamiento del polideportivo Marqués de Samaranch de dos chirimbolos separados por menos dos metros, “un atentado -afirmó- contra la estética urbana del Paseo Imperial y contra la sensibilidad de los cientos de usuarios del polideportivo”.
Iglesias exigió que el Ayuntamiento desmonte al menos 12 de los 36 chirimbolos que se han instalado en Arganzuela, "ya excesivamente castigado por la publicidad en relación con otros distritos: si repartimos los 500 chirimbolos que se han instalado hasta la fecha en Madrid entre los 21 distritos, a Arganzuela le corresponderían 24, cuando soporta 36, un 25% más que la media”.
Finalmente, Iglesias estimó que Madrid "sufre una carga publicitaria insoportable para los ciudadanos, aunque no para el gobierno del PP, que ha vendido con fines promocionales espacios de polideportivos y otros edificios municipales, a empresas privadas para permitirla instalar chirimbolos de publicidad comercial sin ningún criterio estético o paisajístico”.