Feijoo, sin segunda oportunidad
La Plaza do Toural fue el escenario amenizado con las músicas del partido para los 'populares', los únicos que se han arriesgado a celebrar la apertura en un espacio abierto.
El líder del PPdeG y aspirante a la Presidencia de la Xunta,
Alberto Núñez Feijóo, arrancó la campaña con el propósito de que su partido recupere el poder después de haber "aprendido de sus errores" en estos cuatro años de oposición y, entre otras razones, pidió el voto al electorado convencido de que es necesario "oxigenar" la vida política gallega.
Feijóo solicitó el apoyo de los que "dejaron de votar" PP en las pasadas autonómicas de 2005, cuando la formación entonces dirigida por
Manuel Fraga perdió la mayoría absoluta tras 16 años en el poder y dio paso a un gobierno de coalición formado por socialistas y nacionalistas y precisamente para conseguir el voto de los "defraudados" con el bipartito les garantizó su "compromiso" de no pedir "una segunda oportunidad" si les "falla".
Touriño promte un "nuevo impulso"
Por su parte, el PSdeG desplazó el escenario de las anteriores elecciones autonómicas de la céntrica Plaza Roja santiaguesa al Hotel Monumento San Francisco, instalado en el casco antiguo. Allí, el candidato socialista a la reelección,
Emilio Pérez Touriño, compartió escenario con el alcalde compostelano,
Xosé Sánchez Bugallo y pidió a los que le votaron "
hace cuatro años y a los que apoyaron a Zapatero" que le otorguen "
un nuevo impulso" y solicitó a los ciudadanos que "
no se queden en casa o dormidos, porque si no, la pesadilla les durará cuatro años".
Durante su intervención ante unas 300 personas, Touriño resaltó que, tras su paso por la Xunta, Galicia "
es un país con más igualdad social y con más derechos a las personas". Por ello, incidió en que "
ahora que se trata de decidir el futuro, lo que menos necesita la Comunidad gallega es que el PP vuelva al poder".
Quintana y el "voto masivo"
El BNG ha elegido un espacio cubierto, el Multiusos de O Sar de la capital gallega, en donde aglutinaron a cerca de mil personas para arropar al candidato,
Anxo Quintana, que acude por segunda vez como cabeza de cartel nacionalista a unos comicios autonómicos.
Quintana apeló al voto "masivo" de los nacionalistas y galleguistas para conseguir tras el 1 de marzo "un país más fuerte" y avisó de que la abstención "sólo favorece al PPdeG", al que culpó de fomentar la desmovilización. "
Son horas de pedir el voto", comenzó.
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