Nadie sabe nada de nada

Pero, ¿qué es lo que está pasando en el mundo?

Bermejo no sabía que cazaba en “otra Comunidad Autónoma”;
Rubalcaba no sabía que sus polis cobraban dietas y días libres por cazar a marroquíes;
Esperanza no sabía que alguno de sus hombres cobraba comisiones espúreas;  
Camps no sabe nada de su posible implicación en unos trajes de 30.000 euros;
Rajoy no sabía que el Correa seguí allí, como el dinosaurio de Monterroso;
Juan Pablo II –que en “gloria esté”- no sabía que su brazo derecho Maciel era un pederasta, violador de jóvenes y traficante de dolantina;  
Benedicto XVI no sabía que un obispo lefebvriano negaba el holocausto;
Zapatero y Solbes no  sabían que en vez de un millón de trabajadores más iba a ver un millón más de desempleados….

Y así, pongan ustedes tantas y tantas ignorancias más que están apareciendo en los medios de comunicación...

¿Qué es lo que está pasando? Ahora resulta que nadie sabe nada de nada.
Todo el mundo mira para otra parte.
¡No, mucho peor! Todo el mundo mira al de enfrente:

Rubalcaba señala indirectamente a los polis jefes de abajo;
Camps se quiere querellar contra Garzón;
Rajoy salva como puede los muebles afirmando que Camps es honrado y, a lo más, que a él no le gusta la expresión “poner la mano en el fuego por Aguirre”;
los Papas se conforman con decir que Dios es grande y perdona a los pecadores;
y Zapatero arremete, a falta de otros argumentos más inteligentes y posibles, contra la Oposición, que lo único que quiere es “derribar al Gobierno”.

Surrealista.
Increíble.
Inconcebible.
Triste.
Bochornoso.
Peligroso.
Deleznable.
Infantil.

Vivimos los momentos más demoledores y rastreros de la Política, la Religión y la Justicia.