A su parecer, el mercado laboral y otros mercados "precisan un marco más competitivo y flexible" para situar a España en una buena posición de partida para afrontar el nuevo escenario que se abra cuando la economía internacional se recupere.
Fernández Ordóñez advirtió de que la crisis internacional incidió en la economía española "en un momento muy delicado", cuando se había iniciado el proceso de ajuste de los desequilibrios acumulados en una larga etapa de crecimiento, lo que ha provocado, entre otros efectos, "un extraordinario aumento del número de desempleados".