El presidente Hugo Chávez sostuvo que la medida gubernamental de sacar del aire a 34 emisoras de radio obedece a los esfuerzos ofiaiales de hacer cumplir las leyes. "Ninguna libertad puede ser ilimitada donde están las leyes y el reconocimiento de la Constitución si quieren vivir donde no hay leyes, váyanse con Tarzán a la selva", declaró.
La Comisión Nacional de Telecomunicaciones (Conatel) rescindió este fin de semana los permisos de transmisión de una treintena de radios privadas con el argumento de que operaban de forma "ilegal", porque no actualizaron, en junio pasado, sus datos ante ese organismo.
La medida podría extenderse a un total de 240 radios y 45 televisiones, anunció el pasado 16 julio el ministro de Obras Públicas, Diosdado Cabello.
El gremio nacional de periodistas, organizaciones civiles venezolanas así como organismos internacionales han repudiado la decisión gubernamental, que ha generado protestas pacíficas de calle en Caracas y otras ciudades del país.
El Colegio Nacional de Periodistas (CNP) alertó que el "cierre de las emisoras" así como iniciativas legislativas en materia de periodismo y control de medios formaría parte "de un ataque orquestado por todos los instrumentos estatales para amedrentar a la población e instarla a que haga silencio".
La oposición venezolana en bloque, junto con el sector empresarial y la jerarquía de la Iglesia católica rechazó la salida del aire de las emisoras de radio por la decisión administrativa de Conatel que, según sus autoridades, se ajustaba plenamente a la ley.
La oposición adjudicó la "arremetida contra los medios privados" a los planes supuestamente totalitarios del Gobierno de Chávez.
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